Se acerca la temporada navideña, y más allá de serla celebración más importante para los creyentes, también significa gastardinero. Esa época de gastos desorbitantes cada vez comienza más temprano.
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Se conoce como «viernes negro» (en inglésBlack Friday) al día que inaugura latemporada de compras navideñas con significativas rebajas. Es un día después del Día de Acción deGracias en Estados Unidos, y es posiblemente el día más consumista del año en ese país, y cada vez más en el mundo entero.
En el 2013, aproximadamente 141 millones de personas en los Estados Unidoscompraron durante el viernes negro, gastando un total de 57.400 millones dedólares. Detrás de lo que parece un día para obtener los mejores descuentos, en realidad se esconde una trampa en la que terminamos gastando mucho más.
La expansión por el mundo
Esta festividad comenzó en Estados Unidos ypoco a poco se ha ido extendiendo por el resto de países del mundo.
El término se originó en Filadelfia, donde se utilizaba para describir el densotráfico de gente y vehículos que abarrotaba las calles al día siguiente deAcción de Gracias.
El uso de este término comenzó alrededor de1961 entre los oficiales de policía encargados de la regulación del tráfico,popularizándose hacia 1966, y extendiéndose al resto de los estados a partir de1975.
El Black Friday se está expandiendo. Por ejemplo, en España se ha impulsado principalmente enámbitos de compra en línea por medio de Internet. Aunque actualmente no es tan popular, el volumen de búsqueda del término"Black Friday" aumentó un76.4% entre noviembre del 2013 y noviembre del 2014 y continúa creciendo.
En 2016, la cesta media de los españolesdurante el Black Friday fue de 82,81 euros. Si un español gana 28 euros al día,el gasto por persona durante esta jornada de descuentos, equivaldría al sueldo detres días.
Organizarsey comprar solo lo necesario
Las ofertas y promociones pueden verse muy llamativas. Sin embargo, terminan llevándonos a un consumismo innecesario y en un tiempo nos daremos cuenta de que no necesitábamos nada de lo que adquirimos. Además, muchas veces descubrirás que en realidad el precio que se promociona como rebaja no es tan diferente al anterior.
Es necesario organizar y planificar. A lahora de comprar, es normal que nos sintamos tentados de dejarnos llevar por elimpulso y querer comprar todo. Cuándo esto suceda, plantéate algunas preguntas:¿Es una buena compra? ¿Lo voy a utilizar? ¿En qué ocasiones?
Después de cualquier compra, debemos guardar los comprobantes,facturas y recibos. Además de ser imprescindibles para realizar cambios ydevoluciones, a veces son necesarios para hacer efectiva la garantía de losproductos (en caso de que sea necesario).