Elirrespeto a la fauna nativa sigue siendo un lamentable titular, y moneda corriente para el actual gobierno estadounidense. Esta vez,Donald Trump, contrariando a su rival político, promueve una ley que permitiría la caza en tierras públicas de Alaska.
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La administración Trump continua moviéndose para revertirlas reglas emitidas por Obama que prohíben a los cazadores en algunas tierraspúblicas de Alaska, hostigar a los osos pardos con tocino y donas y usarfocos para disparar a osos negros y cachorros que hibernan en sus guaridas.
Modificacióna la ley
El Servicio deParques Nacionales emitió un aviso el lunes 21 de mayo sobre su intenciónde enmendar las regulaciones para la caza deportiva y la captura en reservasnacionales para alinear las reglas federales con la ley del estado de Alaska.
Bajo los cambios propuestos, a los cazadorestambién se les permitiría cazar osos negros con perros, matar lobos y cachorrosen sus guaridas, y usar botes a motor para cazar caribúes.Estos y otros métodos de caza (condenados comocrueles por los defensores de la protección de la vida silvestre) fueronprohibidos en tierras federales en 2015. Los ciudadanos tienen 60 días paracomentar sobre las nuevas reglas propuestas.
Alaskatiene 10 reservas nacionales que cubren casi 37,000 millas cuadradas (95,830 kilómetros cuadrados).
La expansión de los derechos de caza en tierrasfederales ha sido una prioridad para el Secretario del Interior, Ryan Zinke, unexcongresista de Montana que exhibe un oso taxidermizado en su oficina deWashington junto con cabezas montadas de un bisonte y un alce.
Los hijos del presidente Donald Trump también sonávidos cazadores de trofeos en excursiones a África y Alaska.
Detractores
Collette Adkins, abogada y bióloga del grupo dedefensa Centro para la DiversidadBiológica, expresó su indignación por el retroceso.
"Los métodos de caza crueles y dañinos comomatar cachorros de oso y sus madres cerca de las guaridas no tienen cabida ennuestras reservas nacionales", dijo a medios locales.
La HumaneSociety de los Estados Unidos dijo que se opondría a las nuevas reglas."Estas tierras federales son refugios para lavida silvestre y el Servicio de ParquesNacionales tiene el mandato de administrar estos ecosistemas de una maneraque promueva la conservación", dijo a AP Anna Frostic, abogada del grupo dederechos de los animales. "Esta regla propuesta, que permitiría la matanzainhumana de nuestros carnívoros nativos en un intento equivocado de aumentarlas oportunidades de caza de trofeos, es ilegal y no debe finalizarse" agregó.
Esta medida es lamentable, y si no vuelve a revertirse pronto los osos no solamente estarían en peligro, sino que serían sometidos a una cruel tortura al ser cazados utilizando ese tipo de trampa.