A través de algunas publicaciones, filtran el cruel apodo que Lady Di le puso a Camilla Parker-Bowles, la amante del príncipe Carlos. En público, ambas simulaban llevarse bien; pero la realidad era muy distinta.

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El matrimonio entre Diana y Carlos en 1981

En fecha de 29 de julio de 1981, se ofició la fastuosa boda real. Todos recuerdan el increíble vestido de Diana de Gales, así como la histórica ceremonia televisada y vista por millones de personas en todo el planeta.

Se hablaba de un verdadero “cuento de hadas”, pero esta unión luego se resquebrajó. Diana y el príncipe tuvieron dos hijos, pero esto no fue suficiente para mantener a flote la familia y el matrimonio entre ambos.

A inicios de los años 90 se habían separado y en 1996 se oficializó su divorcio. Siempre se dijo que la manzana de la discordia había sido Camilla Parker, quien mantuvo una relación clandestina con el príncipe aunque estuviera casado.

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Fuente: Vanitatis

Situaciones tensas en la nobleza británica

Entre el príncipe y Camilla hubo siempre encuentros fugaces. Se conocieron en los años 70, demostrando química entre ambos. Sin embargo, Camilla se casó en 1973 con Andrew Parker Bowles.

Ocho años después, ella fue invitada a la boda del príncipe y Diana de Gales. Nadie imaginaba lo que acontecería luego, aunque se sabía que Carlos y Camilla tenían devaneos ocasionales y algo había entre ambos.

Esta situación causó incomodidades, sobre en la joven Diana que no tardó en mirar con malos ojos a su “rival”. De hecho, Lady Di le puso un mote cada vez que la veía: “la llamaba «el rottweiller», porque parecía un perro”.

Además, lo de rottweiler también venía porque “esa raza de perro no suelta a su presa”. Y Diana sentía que esa mujer no soltaba a su esposo. Al final, este tipo de situaciones arruinaron el matrimonio.

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Fuente: CV NOTICIAS

Camilla y Carlos se casaron en 2005

Finalmente, el príncipe se separó de Diana en 1996. Camilla también se divorció, pero esperaron años para unirse como pareja. Diana de Gales falleció en un accidente en 1997, por lo que un largo luto empañó a la familia real.

Todas estas infidencias se han develado en el libro “Diana: la última palabra”, escrito por Simone Simmons. Se trata de un texto que indaga en secretos y cuestiones muy íntimas de la nobleza británica.

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¿Qué otros secretos guardarán los pasillos del palacio de Buckingham? Lo cierto es que siempre hay especulaciones en torno a la realiza del Reino Unido.

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LA NACION