En la búsqueda de frenar el calentamientoglobal, se han desarrollado grandes avances tecnológicos a gran escala, sinembargo, no todos son positivos, algunos podrían empeorar la situación.
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Un estudio publicado esta semana en Nature por investigadores de University of Exete índice que la geoingeniería solar podría no ser tanpositiva para el ambiente.
Contexto
La geoingeniería solar se refiere a unavariedad de métodos propuestos paracontrarrestar el calentamiento global mediante la reducción artificial de laluz solar en la superficie de la Tierra.
La propuesta de geoingeniería solar másconocida es la inyección de aerosolestratosférico (SAI), que tiene impactos análogos a los de las erupcionesvolcánicas.
Las observaciones posteriores a lasprincipales erupciones volcánicas indican que las mejoras de los aerosolesconfinadas a un solo hemisferio modulan efectivamente la actividad del ciclóntropical (TC) del Atlántico norte en los años siguientes.
Elestudio
Los investigadores identifican los efectos deescenarios globales y de un solo hemisferio en la actividad de TC del AtlánticoNorte utilizando el modelo de circulación general HadGEM2-ES y varios métodosde identificación de TC.
Muestran que un resultado robusto de todoslos métodos es que la SAI aplicada alhemisferio sur mejoraría la frecuencia TC en relación con una aplicación SAIglobal, y viceversa para la SAI en el hemisferio norte.
Los problemas
El estudio indica que la inyección de aerosol en la estratosferadespués de una erupción volcánica puedeconducir a distribuciones espaciales y temporales radicalmente diferentesdependiendo de la altitud y la latitud de la inyección. Esto significa que alteraría la actividad volcánica del planeta, algo que puede ser muy peligroso.
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Sugieren que la inyección de aerosoles en laatmósfera de zonas del hemisferio norte puede reducir la actividad ciclónica tropical, responsable de fenómenosmeteorológicos recientes como el huracán Katrina.
Además, advierten, aumentaría la probabilidadde que la franja del Sahel, situada entre el desierto del Sahara y la sabanasudanesa, sufra sequías.
Los resultados vuelven a enfatizar laspreocupaciones con respecto a la geoingeniería regional y deberían motivar alos legisladores a regular los despliegues de geoingeniería unilaterales a granescala.