Nuestro idioma tiene mucha riqueza, aunque con los años mucha de ella se ha perdido. Los anglicismos han ganado terreno, hay palabras nuevas todo el tiempo, pero el “castellano antiguo” puede tener vigencia: sólo es cuestión de conocerlo y practicarlo.
1. Carcunda
Viene del portugués, donde se designaba así a los absolutistas en las luchas políticas portuguesas de principios del siglo XIX.
Básicamente, significa “persona de ideas o actitudes retrógradas”, conservador. Seguro conoces a más de uno a quien le cabe el título.
2. Casquivano
Una persona “de poco asiento y reflexión”. Es decir irreflexivo.
También se utiliza para hablar de alguien que “no tiene formalidad en sus relaciones sexuales”. Pero eso, claro, no tiene por qué ser un insulto.
3. Fantoche
Fantoche es un “muñeco grotesco frecuentemente movido por medio de hilos”. Pero además, se puede utilizar para insultar de muchas formas.
Las definiciones que brinda la RAE para esta alucinante palabra del castellano antiguo son:
- Persona grotesca y desdeñable.
- Sujeto neciamente presumido.
- Persona vestida o maquillada de forma estrafalaria.
Hay más de un fantoche dando vueltas, ¿no crees?
4. Petimetre
“Persona que se preocupa mucho de su compostura y de seguir las modas”.
¿Algún frívolo en la sala?
5. Verriondo
Dice la RAE:
“Dicho de un animal, especialmente de un cerdo: Que está en celo”.
No necesitas que te explique la analogía con personas, ¿Verdad?
6. Zascandil
Para esas personas de las que no te fías ni un poco, esta es la palabra que debes usar. Su definición formal:
- Persona de poca formalidad, inquieta y enredadora.
- Hombre astuto, engañador, por lo común estafador.
7. Zurumbático
Para terminar, otra bella palabra que nos regala el portugués. En aquel idioma, significa 'sombrío, melancólico'. Pues se trata de un derivado de la palabra "sombra". Pero en español, se usa con otra connotación. Según la RAE, significa:
Lelo, pasmado, aturdido.
¿Te han gustado estos insultos del castellano antiguo? ¿Te animas a empezar a usarlos?