El cáncer es una de las enfermedades más terribles en la actualidad. Aunque es posible superarla, lograrlo es toda una batalla. Así mismo, entre los posibles tipos de cáncer uno de los que tiene mayor tasa de mortalidad es el de pulmón. Por lo cual, la comunidad científica tiene una excelente noticia para la población en general, el cáncer de pulmón en su etapa inicial podrá ser erradicado con facilidad muy pronto.
Uno de los cánceres más peligrosos
El cáncer de pulmón es una de los que tiene mayor tasa de mortalidad. Este tipo de cáncer es muy difícil de detectar en una etapa temprana, que es cuando las expectativas de vida del paciente son mejores. En un 80% de los casos, esta enfermedad no es diagnosticada sino hasta el estadio IV, cuando las posibilidades de sobrevivir son prácticamente nulas.
Así, el cáncer de pulmón se ha convertido en un peligroso enemigo a combatir.
Nuevas terapias en puerta
Recientemente, la comunidad médica ha dado a conocer un nuevo método que ha dado excelentes resultados para erradicar del organismo las células cancerígenas de los pulmones; cuando la enfermedad se encuentra en un estado inicial. Esta terapia resulta mucho más eficiente y beneficiosa que la cirugía y la quimioterapia, que son la más tradicional para tratar el cáncer hasta el día de hoy.
Se trata de un tratamiento de inmunoterapia, que no tiene la función de destruir las células cancerígenas de manera directa; sino que fortalecen y estimulan el sistema inmune. De tal manera que es el propio organismo el que se deshace de las células malignas presentes en los pulmones.
Este tratamiento ya se ha aplicado en pacientes y los resultados han hablado por sí solos. Los pacientes tratados mediante la inmunoterapia han aumentado drásticamente su esperanza de vida y las posibilidades de erradicar por completo el cáncer de sus pulmones.
En el caso del cáncer de pulmón en un estado avanzado, aun no existe una terapia que pueda eliminar las células malignas; pero se ha aplicado un tipo de terapia que ha aumentado la expectativa de vida de los pacientes y ha disminuido el malestar por la enfermedad, aumentando la calidad de vida.
Este es un tratamiento de terapia dirigida, durante el cual se estudian en detalle el tumor que presenta el paciente para atacarlo a través de terapias específicas. Así, se consigue controlar por más tiempo el avance de la enfermedad. De todos modos, en este caso, no es posible todavía la cura.
Sin embargo, la gran novedad lleva por nombre dacomitinib. Esta es una droga que inhibe la aparición de la proteína quinasa, que favorece el avance del cáncer de pulmón. De esta manera se logra frenar de manera sustancial la evolución de la enfermedad, aumentando la esperanza de vida del paciente y mejorando las posibilidades de devolverle la salud.