La educación sexual es un tema de suma importancia. Desde lo local hasta lo global las repercusiones de evadir el tema con adolescentes y niños promueve una cultura de ignorancia ante temas de vital importancia. Las enfermedades sexuales son una pandemia a nivel mundial. Basta con recordar la desinformación durante la crisis del SIDA en los años ochenta para recordar por qué desde hace años la educación sexual es obligatoria a partir de cierta edad.
Gran parte de los cambios para comenzar la educación sexual obligatoria comenzaron cerca del año 2000, pero las últimas dos décadas han traído nuevas cuestiones que han obligado a muchos países a comenzar la educación sexual desde una edad más temprana. Algunos lo harán desde secundaria mientras que otros incluso antes.
Esto es importante porque la educación sexual no sólo es enseñar cómo funciona el cuerpo y acerca del acto sexual, tiene muchas ramificaciones que pueden ayudar a un crecimiento sano y pleno.
Merecen una explicación
Los niños son curiosos por naturaleza y no deben ser alejados de la verdad por una excusa como la inocencia. Todo lo que aprenden es integral y tal vez si son niños pueden ir aprendiendo acerca de ese tema paulatinamente, pero mantenerlos en la oscuridad simplemente es tapar el sol con un dedo.
El sexo está en todos lados
Nuestra cultura ha entrado en la etapa de la hipersexualización. Los anuncios en la calle, los comerciales en la televisión y sobre todo en Internet, una herramienta que incluso los más pequeños aprenden a dominar rápidamente. No importa cuántos seguros y programas instalen los padres, si ellos quieren encontrar algo, lo harán, y es mejor que tengan la madurez emocional para decidir qué es lo correcto en esos casos.
Mientras más rápido, mejores las relaciones personales
Un ejemplo de esto son las nuevas caricaturas que están mostrando parejas del mismo sexo. Estos programas están abriendo el diálogo para que los niños vean que es completamente natural y la educación sexual les permite entenderlo de una forma mucho más completa. De otra forma, hay gente que sólo repite un punto de vista personal y no una verdad objetiva, lo cuál limita la forma de relacionarse de los más jóvenes e inmediatamente los posiciona en una situación de la que ellos no pidieron ser parte.
Es natural
Normalmente el rechazo a la educación sexual tiene que ver con cuestiones religiosas. Mucha gente se escuda diciendo que se les debe enseñar a leer y escribir, así como matemáticas antes, pero eso es algo que aprenden desde el inicio. ¿Por qué no dejar que la educación sexual sea así?
No promueve la promiscuidad
Esto es hablando de jóvenes que ya están pensando o teniendo relaciones sexuales. Estudios han demostrado que a diferencia de lo que muchos piensan, darle condones y pláticas acerca de sexo a jóvenes, no los hace más propensos a tener sexo, en cambio les da las herramientas para que cuando decidan hacerlo (porque si quieren tener relaciones, las tendrán) eviten enfermedades o embarazos no deseados.
Además, la llegada de Internet no sólo permite el acceso a la pornografía. La educación sexual actualizada les ayuda a entender temas como el cyberbulying, sexting, y más.
Finalmente, la educación sexual les enseña (sobre todo a los hombres) a respetar a su pareja. A ser más conscientes de las cosas que hacen, con quién las hacen y a mantener una sexualidad sana, no reprimida, que sin duda ha sido la causa de muchos problemas en la actualidad.