Musicoterapia: ¿desde cuándo se receta música para sanar dolencias?

La musicoterapia sigue ganando terreno como método terapéutico efectivo para el tratamiento de diversas enfermedades. De hecho, este tipo de terapia se ha implementado en pacientes con TEA, TDAH, Alzhéimer, depresión, estrés y ansiedad. Pero, ¿Desde cuándo se receta música para sanar dolencias?

Si bien es cierto que la práctica se ha vuelto popular en los últimos años, la verdad es que se ha usado desde tiempos antiguos. Demostrando así que ha sido una terapia bastante efectiva en distintos ámbitos. Descubre de qué se trata este método terapéutico y cuáles son los beneficios de la música en el cuerpo.

¿Qué es la musicoterapia?

La musicoterapia es un método terapéutico en el que se usa la música, así como también, cada uno de los elementos propios de la misma. Es decir, los ritmos, efectos de sonido, melodías, armonías, etc. Esto con el objetivo de mejorar la comunicación, la motivación, el aprendizaje, las relaciones interpersonales e incluso, los movimientos corporales.

Asimismo, está dirigida a las personas que necesitan mejorar su calidad de vida. Ya que este tipo de terapia no solo abarca el plano físico, también lo hace con el cognitivo y el emocional.

En este sentido, las más beneficiadas son aquellas personas que sufren problemas con su salud mental. Así como también, lesiones cerebrales, demencia, autismo y en muchos casos, enfermedades terminales. A pesar de que, actualmente, se usa, frecuentemente, en bebés, niños y ancianos, la verdad es que cualquier persona puede someterse a la misma.

Ahora bien, durante una sesión de musicoterapia, el terapeuta utiliza las respuestas y conexiones del paciente con la música. De esta manera, el encargado de la terapia ayuda a estimular los cambios positivos en el paciente, especialmente, en su estado de ánimo y su bienestar mental en general. Los métodos van desde escuchar música, hasta crearla, usando distintos instrumentos musicales.

Además, algunas veces involucra el canto y el baile, lo que permite elevar la autoestima a través de la autoconfianza. Incluso la improvisación es fundamental dentro de la musicoterapia, es decir, hacer sonidos en un momento determinado por el terapeuta.

¿Quién es la persona encargada de guiar la musicoterapia?

Para sacar el mejor provecho de la musicoterapia, es necesario que la persona encargada sea un profesional cualificado y por supuesto, que tenga experiencia. Ya que se requiere de una buena guía para el paciente durante el tiempo que tarde la terapia.

Ahora bien, un musicoterapeuta no es, solamente, un profesor de música, puesto que la finalidad de terapia no tiene nada que ver con enseñar música. El objetivo es ayudar al paciente a resolver sus problemas a través de la música y sus componentes.

Por esta razón, debe contar con una estricta formación, así como la capacidad de registrar tanto los cambios como la evolución de su paciente. De este modo, el profesional debe tener conocimientos variados en aras como la psicología, pedagogía y medicina. Sin olvidar que también requiere de experiencia en el aspecto musical para guiar la terapia de la mejor forma posible.

¿Cuáles son los tipos de musicoterapia?

Cuando se trata de la musicoterapia, no se limita a una sola forma de hacer las cosas, todo lo contrario. La terapia de la música dispone de una gran variedad de opciones para los diferentes tratamientos que requiera el paciente. En este sentido, existen dos tipos de musicoterapia que son, la receptiva y la activa:

Musicoterapia receptiva

Durante la musicoterapia receptiva, el paciente solo se limita a escuchar diferentes tipos de sonidos musicales preparados por el musicoterapeuta. Uno de los objetivos de este tipo de terapia es ayudar a que el paciente mejore su estado de ánimo y se sienta motivado. Además, la musicoterapia suele ser muy relajante, lo que permite disminuir los niveles de ansiedad y nerviosismo.

Musicoterapia activa

A diferencia de la anterior, la musicoterapia activa requiere mayor participación por parte del paciente. Ya que el mismo debe interactuar, con ayuda del terapeuta, puede ser cantando, tocando algún instrumento e incluso bailando. La musicoterapia activa es más efectiva, llegando a tratar enfermedades difíciles como es el caso del TOC, Alzhéimer y depresión.

¿Cuál es el origen de la musicoterapia?

A pesar de que la musicoterapia da la impresión de ser un concepto moderno, la verdad es que existe y se aplica desde tiempos antiguos. No obstante, la terapia actual cuenta con una base científica muy diferente a épocas anteriores.

Registros recopilados desde hace unos cientos de años indican que la música se viene utilizando desde el año 1500 antes de Cristo. En ese entonces, se aplicaba como tratamiento para ciertos problemas de salud.

Por ejemplo, en el antiguo Egipto, se usaba para tratar problemas de infertilidad en mujeres. Mientras que en la antigua Grecia la música ayudaba a prevenir y tratar distintas enfermedades. Del mismo modo, en China, hace miles de años, se utilizaba la musicoterapia para sanar algunos órganos, esto por medio de notas musicales específicas.

Más adelante, en el siglo XVIII se inició una investigación, con el objetivo de descubrir qué efectos producía la música en el cuerpo humano. Pero no desde un punto de vista empírico, en esta ocasión se trataba de una perspectiva más científica.

A mediados del siglo XX se empieza a aplicar la musicoterapia de manera práctica y científica. Los encargados de la terapia tocaban diferentes instrumentos musicales en varios hospitales americanos. En dichos centros médicos se encontraban ingresados decenas de combatientes de guerra.

Desde entonces, comenzaron las primeras investigaciones oficiales e incluso, la formación académica de los primeros musicoterapeutas. En el año 1974, en París, se celebró el primer congreso mundial de musicoterapia. Hoy en día, esta increíble terapia se mantiene en una evolución constante que le permite una mejor adaptación a las nuevas tecnologías. De este modo, la terapia de la música se ha convertido en un método terapéutico muy efectivo para el tratamiento de diversas enfermedades y trastornos.

¿Cuáles son los beneficios de la música?

La musicoterapia aporta muchos beneficios para la salud, de hecho, es ideal como tratamiento para enfermedades y trastornos específicos. En este caso, la terapia de la música ofrece beneficios cognitivos, físicos, sociales y emocionales. Siendo estos últimos muy de apreciados, especialmente, por aquellas personas que tienen problemas de confianza y se les dificulta relacionarse con otros.

Beneficios cognitivos

• Mejora la capacidad de orientación
• Así como también, el aprendizaje
• El desarrollo de las funciones cerebrales
• La expresión oral
• La atención
• El lenguaje
• Las capacidades comunicativas

Beneficios físicos

• Mejora la musculatura
• Ayuda a que el cuerpo se mantenga más relajado
• Fortalece las articulaciones y las hace más flexibles
• Mejora la coordinación del sistema locomotor

Beneficios sociales y emocionales

• Eleva la autoestima
• Promueve la integración
• Mejora tanto las relaciones como las habilidades sociales
• Reduce los problemas de ansiedad, así como los afectivos y emocionales
• Mejora el desarrollo personal
• Mejora el estado de ánimo
• Previene el aislamiento social
• Facilita la expresión de emociones

¿Qué tipo de trastornos se pueden tratar con musicoterapia?

La efectividad de la musicoterapia a la hora de tratar trastornos importantes es realmente alta. De hecho, existen 3 tipos de trastornos en los cuales la terapia de la música está siendo especialmente eficaz, a continuación, te mostramos cuáles son:

TEA o Trastorno del espectro autista

Los niños con condición de autismo se caracterizan por mostrar un gran interés por algo en específico. Por lo general, algunos sonidos y la música en sí suelen ser objeto de fijación por parte de los pequeños que padece este tipo de trastorno.

A través de la música, las personas con condición de autismo, especialmente niños y jóvenes, son capaces de expresar con mayor facilidad sus emociones. Así como también, pueden mejorar la gestión de sus crisis, ya que se sienten más seguros escuchando música en sitios que les generan incomodidad. Asimismo, la musicoterapia les ayuda a disminuir sus niveles de ansiedad, mejorando su estado de ánimo.

TDAH

También conocido como déficit de atención e hiperactividad, es otro de los trastornos que pueden ser tratados por medio de la musicoterapia. Hay que tener presente que, la música puede convertirse en un gran medio para relajar el cuerpo. Lo que ayuda mucho a los pacientes que padecen TDAH, ya que los mantiene más calmados.

Alzhéimer

Otra de las enfermedades que también pueden ser tratadas con musicoterapia, es el Alzhéimer. Si bien es cierto que esta enfermedad no tiene cura, la terapia de la música puede evitar que este padecimiento se agrave. Lo que es ideal, puesto que esta terapia no es invasiva y tampoco requiere la administración de fármacos. Desde la antigüedad, la música está estrechamente ligada a los recuerdos y las vivencias, despertando sensaciones y emociones muy agradables.

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Fuentes: NYtimes, Medical News Today, Neo Música.