La ansiedad se haconvertido en el mal de nuestros días, por lo menos en uno de los más comunes. Los desórdenes mentales provocados por la ansiedad son las enfermedadesmentales que más aquejan a mundo occidental y mientras las drogas legalespueden disminuir la ansiedad, el precio que pagas por ellas es alto. No hablamos del costode cada pastilla, sino de los efectos secundarios que pueden ser pérdida dellibido, incremento del apetito e insomnio entre muchas otras cosas. 

Pero sentiransiedad, por más que sea común, también es controlable. Hay distintas manerasde luchar y calmar la ansiedad,  pues no se trata sólo de reducir la tensión, sino decada día dar lo mejor de nosotros para erradicarla por completo. Claro que lavida no es perfecta y siempre existirán situaciones que activen nuestraansiedad, pero eso es una cosa y otra es vivir en un estado de ansiedad crónicaque consuma tu vida.  

Los síntomas de la ansiedad pueden ser físicos (taquicardia o palpitaciones, opresión en el pecho y falta de aire, temblores, sudoración), psíquicos (inquietud, agobio, sensación frecuente de amenaza o peligro, ganas de huir o de atacar, inseguridad, sensación de vacío) y también de conducta, cognitivos y sociales. Pero aquí son centraremos en cómo calmar la ansiedad.

Grita

gritar

Hablar es una gran herramienta  para calmar la ansiedad. Demostrar nuestros sentimientos, por más oscuros que parezcan, ante otra persona, siempre aliviará nuestro cuerpo y mente, además de saber que podemos contar con alguien. Sin embargo, además de hablar con alguien, puedes intentar gritar. Liberar toda la frustración a través de esta actividad relaja el cuerpo como si liberaras la presión de una olla.   

Haz ejercicio

correr

A diferencia de la depresión, que puede imposibilitar a alguien para hacer alguna actividad física, la ansiedad te puede tener bastante activo en situaciones pasivas. De nuevo, tal como gritar, hacer ejercicio es liberar a tu cuerpo de todo lo que sucede en su cabeza, sólo que aquí lo traduces al ejercicio físico. Mientras más corras o más cargues, tu cuerpo comenzará a bajar sus niveles de ansiedad y así ayudarte a entender a cómo mejorar para siempre.   

Corta la cafeína

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Tal vez te cueste mucho trabajo despertar por las mañanas sin tu obligatoria taza de café, pero la cafeína es una de las peores cosas que puedes tomar si sufres de ansiedad. Hay personas que desarrollan tics y temblores sólo porque algo les inquieta y toman café sin medida. Después de unos meses ni siquiera lo extrañarás.   

Respira adecuadamente

La mejor forma de hacerlo es meditando, pero tal vez aprender a respirar y limpiar tu mente es demasiado para iniciar. Sólo intenta mantener una respiración adecuada, muchas veces la gente no lo nota, pues es algo tan natural que cree que lo hace bien, pero no sabe respirar. Esto puede llevar a que te hiperventiles e incluso causar ataques de pánico en casos muy extremos.  

Intenta entrenar a tu cuerpo para respirar mejor. Dedica 10 minutos al día para enfocarte en tu respiración, después 15 y después 30. Tal vez al final estés listo para comenzar a meditar y librarte de tu ansiedad para siempre. 

Evita que la ansiedad se active

Tal vez sabes muy bien qué te hace tener ansiedad y qué puede provocar un ataque de pánico, lo mejor es alejarte de esas situaciones y entenderlas poco a poco. Incluso puedes comenzar con estrategias de apoyo para relajarte en lugar de preocuparte; respira, ocupa tu mente en otra cosa, camina manteniendo el control de tus acciones y no te dejes llevar por la espiral de descontrol que la ansiedad puede causar.  

Finalmente, buscar ayuda profesional es lo mejor. Mucha gente que sufre de ansiedad no consulta a un psicólogo porque cree que es un problema menor, pero sin duda, buscar a estos profesionales que te escucharán y te ayudarán a ver qué es exactamente lo que tienes, es la mejor forma de comenzar a combatirla y exterminarla desde la raíz.