La citronella despide una fragancia que resulta particularmente desagradable para los mosquitos, siendo así un buen repelente natural. Los productos comerciales más utilizados para mantener alejados a estos insectos contienen dicloro difenil-tricloroetano (DDT), que si bien resulta muy efectivo, puede suponer un riesgo para la salud por su alta toxicidad.
No alcanza con plantar citronella para obtener sus beneficios. Puedes preparar tu propio repelente a base del aceite esencial de esta planta, o hacer velas para reemplazar los productos químicos.
Repelente casero
No es aconsejable aplicar el aceite esencial de citronella puro sobre la piel, ya que puede ser irritante. Puedes mezclarlo con un aceite base de coco, almendras u oliva y usarlo en muñecas y tobillos. También puedes diluirlo con alcohol y usarlo con un atomizador.
Simplemente tienes que mezclar unas gotas de aceite esencial de citronella con el diluyente que hayas elegido y conservarlo en un recipiente. Antes de aplicar, agita bien la preparación.
También es posible utilizar las hojas de la planta. Para eso, coloca 100 gramos de hojas y/o flores de citronella secas en una jarra de medio litro. Llénala con alcohol isopropílico y déjalo reposar por tres días. Luego puedes filtrarlo y aplicarlo sobre la piel.
Si quieres plantar citronella para tener tus hojas siempre a mano, ten en cuenta que la planta se adapta a la mayoría de los suelos pero no tolera demasiado la humedad. Además, necesita recibir una buena cantidad de luz solar.
La duración de estos repelentes es baja, con lo cual es necesario aplicar la mezcla al menos cada dos horas. Ten cuidado de evitar que entre en contacto con los ojos y mucosas. También es aconsejable probar aplicar una pequeña cantidad sobre el antebrazo para comprobar que no genere alergias.
Velas de citronella
Puedes usarlas tanto en exteriores como en interiores. Para hacerlas, necesitarás los siguientes materiales:
- - Latas de conservas u otro recipiente
- - Dos ollas
- - Cera (se pueden utilizar restos de otras velas)
- - Mechas enceradas
- - Soportes metálicos para las mechas
- - Aceite esencial de citronella
- - Pistola de pegamento caliente
1. Corta un trozo de mecha de una medida tal que sobresalga bastante por encima del recipiente (luego córtala).
2. Coloca en uno de sus extremos el soporte metálico y pégalo al recipiente usando una pistola de pegamento caliente. Si el recipiente que has elegido es muy grande, puedes poner varias mechas.
3. Pon la cera en una olla y métela dentro de la otra olla llena de agua. Ponla a calentar a fuego medio hasta que se derrita. Cuando suceda esto, retírala del fuego y agrega el aceite esencial. La proporción es de 50 mililitros de aceite de citronella por kilo de cera. Si quieres, puedes agregarle 25 ml de un aceite con otro aroma, como por ejemplo aceite de limón.
4. Vierte cuidadosamente la cera en el recipiente y déjalo reposar por 48 horas. Corta el exceso de mecha. Puedes decorar los recipientes usando los materiales que quieras, como telas, cuentas, cordones, etc.
Otra opción para lidiar con los mosquitos es construir una trampa usando botellas recicladas. Aprende cómo hacerla haciendo clic acá.