Probablemente en el último tiempo hayas escuchado al menos alguna vez el concepto “empresa con triple impacto”. Como su nombre lo indica, son empresas que tienen en cuenta tres pilares fundamentales a través de los cuales funcionan: una mirada social, una ambiental y, obviamente, nunca pierden de vista el objetivo económico.
Las empresas con triple impacto, también llamadas empresas de tipo B, son un nuevo tipo de empresa que en sus modelos de gestión implementaron usos y costumbres que les permite impactar positivamente de manera integral en el planeta.
Es decir, su funcionamiento implica que no solo generen beneficios económicos, sino que tengan en cuenta el impacto social y ambiental de cada proyecto o producto que llevan adelante. Esto las hace únicas, y al ser un tipo de organización que no para de crecer, también se están convirtiendo en novedosas en todas partes del mundo.
¿Por qué las empresas triple impacto son buenas para el planeta?
El objetivo de este tipo de emprendimientos o negocios no es solo el de ser las mejores de su sector, sino las mejores para el planeta. Esta nueva mirada contribuye positivamente a que estas empresas amplíen su mirada y dejen de ser un simple actor social centrado en generar ganancia económica. Es decir, a través de sus políticas, pueden convertirse en protagonistas del desarrollo sostenible a través de programas beneficiosos para todo el mundo.
En el plano ambiental, según National Geographic, cada año hay una lista de animales y especies que desaparecen fruto del cambio climático, la caza y las destrucciones de sus hábitats. En febrero de 2020, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, divulgó datos que alertan acerca de esta situación. Según explicaron, actualmente hay unas 5.200 especies en peligro de extinción, compuesta en un 25% por mamíferos y anfibios, el 34% por peces, el 20% por reptiles y un 11% por aves.
Si bien es evidente la desaparición de criaturas como los rinocerontes o los grandes felinos, hay también muchas otras que no son tan conocidas pero juegan un papel muy importante en los ecosistemas por las funciones que cumplen. Algunos cumplen funciones polinizadoras, otros sirven de alimento a otras especies, y otros tienen relaciones simbióticas con otras especies que quedarían solas.
Frenar esta problemática es una responsabilidad de todas las personas del mundo. Y las empresas con triple impacto, con sus aportes, pueden ser protagonistas de este tipo de cambio.
¿Qué significa la triada de triple impacto?
Probablemente, al escuchar hablar de este tipo de emprendimiento o negocio, alguna vez te hayas preguntado ¿qué es triple impacto? Esta triada tiene tres conceptos claves para funcionar: el social, el ambiental y el económico. Son dimensiones que funcionan sí o sí de manera conjunta y no podrían sobrevivir una sin la otra. Por eso, es fundamental la sinergia de los mismos.
Uno por uno: ¿qué significan?
- El componente social: Es el valor social de la empresa. Es decir, las políticas salariales, los beneficios para los empleados y sus familias, el régimen de ética y transparencia, y la creación y mantención de un buen clima laboral, entre otros.
- Un componente ambiental: Este componente se refiere al estudio del impacto ambiental generado por la actividad de la empresa y a la adopción de políticas para reducirlo. Por ejemplo con la disminución del consumo energético, la incorporación de actividades de reciclaje, de actividades de separación de residuos, o la capacitación de sus empleados para continuar fomentando un clima de cooperación.
- El componente económico: Obviamente, todo negocio o empresa tiene como objetivo un rédito económico. Sin embargo, las empresas triple impacto son las que se relacionan con el compromiso hacia la comunidad en amplios aspectos. Por eso, la renuncia a obtener beneficios económicos a cualquier costo es una de las características más importantes. Aunque ganar dinero sigue siendo un objetivo fundamental de la empresa, nunca se sacrificará el bienestar de los seres humanos, tanto si son empleados o ajenos a la empresa.
Triple impacto: ejemplos
Ya hay muchas multinacionales en el mundo que han migrado sus modelos de gestión para convertirse en empresas de triple impacto. Además, los nuevos emprendimientos, por lo general, también tienen una mirada más amplia que busca generar el menor efecto negativo posible en el desarrollo del planeta.
Hay que tener en cuenta que, aunque los cambios sean mínimos, pueden impactar favorable y rápidamente en el medio ambiente. La incorporación de políticas de reciclaje, la implementación de espacios verdes en las oficinas y la utilización de productos reutilizables es clave para este objetivo.