Nadie puede dudar el impacto de los seres humanos en el medio ambiente, y si bien es cierto que nuestra imaginación y la ciencia logran grandes cosas, como la cura de enfermedades, también a veces nos llevan a otras que tienen las peores consecuencias para nosotros y nuestro entorno.
Nuestro desarrollo tecnológico nos hace incluso capaces de modificar genéticamente a otros seres vivos, como plantas y otros animales, para que cumplan nuestros deseos.
¿Qué pasaría si lleváramos al extremo esa posibilidad?
Esta muestra de lo que ocurre cuando los animales son modificados genéticamente está hecha a base del proyecto “Guía de la flora y fauna del mundo”, realizado por un pequeño grupo de investigadores de la Universidad de Diseño de Pennsylvania.
La iniciativa consiste de un catálogo de animales y otras formas de vida que han evolucionado o sido modificados de forma inesperada debido a la acción egoísta de los seres humanos, que buscan solo alcanzar sus intereses sin prestar la menor atención a las consecuencias.
Según el grupo desarrollador, algunas de las imágenes “están basadas en hechos, mientras otras están basadas en suposiciones, hipótesis y artículos científicos”.
Los organismos retratados son el resultado de la intervención del hombre, tanto directa como indirecta. Unas representan modificaciones genéticas que cumplen una función económica o estética, mientras que otras son evoluciones inesperadas que se dieron como consecuencia de la destrucción humana.
Puede que algunas parezcan inofensivas o incluso útiles, pero debemos recordar que no tenemos derecho a modificar nuestro alrededor para que “se acomode” a nuestros intereses, sino encontrar la manera de vivir en armonía con nuestro ambiente.
Ese es el propósito del proyecto: demostrarnos que estamos equivocados al querer controlar la naturaleza.
¿Sabías de qué eramos capaces los humanos?