Nota por Antonella Balin,
Universidad de Belgrano (Argentina)(*)
Cazar con aves de presa, como halcones y azores, es una de las prácticas más antiguas; una técnica milenaria cuyos orígenes inciertos se remontan a más de 10.000 años atrás en países de Asia, como China y Japón.
"Cetrería" es el nombre con el que se conoce esta actividad de entrenar y cazar con aves rapaces. En ella, se produce una simbiosis entre el hombre y el animal, donde ambas especies se benefician. Es que entrenar a un ave rapaz requiere establecer un vínculo especial entre el entrenador y el animal.
¿Qué tiene esto de sustentable? La técnica milenaria de cetrería se usa hoy como una alternativa sustentable de control de fauna en aeropuertos de todo el mundo. Los halcones peregrinos son la especie más empleada para evitar lo que se conoce como bird strike; es decir, que otras aves sobrevuelen las pistas de aterrizaje y choquen contra los aviones. De esta manera, se evita el uso por ejemplo, de repelentes químicos. La sola presencia de estas aves, pone a las demás especies en alerta para que abandonen ese sitio al reconocer un posible peligro inminente.
El fallecido naturalista y ambientalista español Félix Rodríguez de la Fuente, quien también poseía conocimientos de cetrería, definió esta práctica como: “La primera vez en que el hombre no sometió al animal al yugo y al látigo”. Fue él quien propuso la aplicación de este método sustentable en el control de fauna de la Base Aérea de Torrejón, España. La idea fue tan efectiva que terminó adoptándose como sistema de control en el Aeropuerto de Madrid-Barajas y, más tarde, se extendió por el resto de España.
Posteriormente, el arte de la cetrería comenzó a implementarse en otros aeropuertos de Europa y cruzó el océano hasta llegar a América. Paraguay, Ecuador, México, Chile y Argentina son solo algunos ejemplos de países latinoamericanos que aplican este método en sus aeródromos.
Aspectos cuestionables
Sin embargo, y a pesar de estar catalogado como una actividad ecológica y sustentable de control de fauna, existen algunas polémicas respecto a la explotación de las aves para este tipo de actividad. Uno de los puntos en debate surge del hecho de si las aves empleadas son criadas en cautiverio o quitadas de sus ambientes naturales para adiestrarlas en esta actividad; o si existen cetreros que utilizan palomas vivas como cebos para los entrenamientos, algo que denuncian organizaciones como Acabemos con el Maltrato a las Palomas (España).
Por otra parte, también están quienes defienden la vocación de los cetreros y su rol en la preservación de aves neognatas. "Los cetreros han sido pioneros en la cría en cautividad de halcones y otras rapaces, y los principales criadores de la actualidad son cetreros", aseguró el doctor Tom J. Cale, creador del Peregrine Fund en Estados Unidos, para la revista El Mundo de España.
Lo cierto es que quieres practican el arte de la cetrería o defienden esta actividad hacen hincapié en que contribuye a rescatar ejemplares, rehabilitarlos, reintroducirlos en sus hábitats naturales y preservar las especies de las distintas aves de caza; además de ser una alternativa ecológica de control de fauna difundida en aeropuertos de todo el mundo.
¿Tú qué opinas?
(*)Otras fuentes de la nota: Andrián Luna - Cetrero.