En este 2024, la ciudad mexicana de San Juan de Parangariticuro cumplirá 193 años de su primera fundación. Este poblado tuvo que mudar su emplazamiento, ya que su lugar inicia quedó bajo la lava del volcán Paricutín.
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El pueblo fue establecido en 1831, en la zona de Angahuan
Sus primeros habitantes eran, en su mayoría, de origen tarasco y purépecha. Desde su nacimiento, el pueblo de San Juan Parangaricutiro vivió de la agricultura, ya que estaba rodeado por excelentes tierras de envidiable fertilidad.
Quizás, la pieza arquitectónica más notable del pueblo era su pintoresca iglesia. Con un estilo barroco, ostentaba un par de torres para los campanarios. Las crónicas del siglo XIX relatan que este pueblo llegó a ser uno de los más privilegiados en su región.
Pero… todo empezó a cambiar en 1941. Durante ese año, un potente sismo demolió casas y agrietó los bastimentos de muchas edificaciones. Ese temblor fue apenas la admonición de una hecatombe que sucedería dos años después, en 1943.
El surgimiento del volcán Paricutín
En pleno mes de febrero de 1943, un cráter de rocas y magma germinó cerca de San Juan Parangaricutiro. La gente oyó muchos ruidos y una columna de humo se erizó encima de la campiña, intimidando a las aves del sitio.
Dicho cráter fue alumbramiento de un volcán. Para los geólogos, los detalles narrados y las fotografías iniciales del volcán Paricutín son de indiscutible valor. En cambio, para el pueblo de Juan Parangaricutiro, fue el introito de una devastación.
En apenas 24 horas, aquel cráter creció 30 metros. Desde el interior de la Tierra, el magma fluía sin control, conformando un montículo cada vez más elevado. Durante varios años, ese cráter siguió aumentando. ¡Y en la actualidad es un volcán de 424 metros de altura!
La lava se extendió casi seis kilómetros a la redonda. Un total de cinco (5) pueblos resultaron afectados, siendo San Juan Parangaricutiro uno de los más destruídos. Las cifras indican que 3.000 personas fueron evacuadas de esta localidad.
El volcán duró 9 años en inagotable actividad
Entre 1943 y 1952, el recién surgido volcán hizo que la región fuese inhabitable. Fue en 1952 cuando liberó una explosión muy devastadora. Luego de ese estallido, el furor volcánico se detuvo, dejando un paisaje erosionado y ardiente en su perímetro.
El pueblo original de San Juan Parangaricutiro fue abandonado bajo lava, cenizas y una sedimentos rocosos. Tan solo permanecieron las ruinas de su antigua iglesia, de la cual tan solo sobrevivió uno de sus campanarios, pues el otro se cayó.
La vegetación ha invadido el asentamiento primerizo de este pueblo, mientras que la torre del campanario de la iglesia se columbra entre las copas de exuberantes árboles. En 1981, el gobierno financió un proyecto para refundar el poblado, a 30 km de su paraje original.
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¿Y qué sucedió con la nueva fundación de San Juan Parangaricutiro? Hoy en día, es el epicentro de un próspero municipio. Un notable porcentaje de sus ingresos llega gracias al turismo: gente que viaja para ver las ruinas del antiguo asentamiento del poblado.
Fuente: MUY INTERESANTE.