La muñeca más famosa del mundo occidentalha dado un gran salto. Ahora una de las versiones lleva un hiyab. Aunque se trata de una figura que representa a una deportista islámica, ha causado mucha polémica, como era de esperar.

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Barbie, la marca de muñecas fabricada porla empresa estadounidense de juguetes Mattel, Inc., fue lanzada por primera vez en marzo de 1959. Ruth Handler es la empresaria estadounidensea la que se le atribuye la creación de la muñeca, inspirada en una muñecaalemana llamada Bild Lilli.

Mucho ha cambiado desde 1959 hasta ahora: por eso se han cuestionado, en más de una ocasión, los estándares (de belleza y sobre el rol de la mujer) que la muñeca representa. Aunque pueda parecer que una muñeca es algo superficial, se trata de algo muy importante dado que, aunque sea de forma involuntaria,  forma parte de la educación de millones de niñas en todo el mundo. A la fecha, Barbie ha representado 135profesiones y oficios.

Barbie se ha convertido en un icono culturaly ha recibido honores que son inusuales en el mundo de los juguetes, tales comocuando en 1974 una sección de Times Square en Nueva York pasó a llamarse BarbieBulevar durante una semana y en 1985 el artista Andy Warhol creó una pintura deBarbie.

La relación complicada de Barbie con el Islam

En septiembre de 2003, Arabia Sauditaprohibió la venta de muñecas Barbie, diciendo que no se ajustaban a los idealesdel Islam.  El Comité para la Propagación de la Virtud yPrevención del Vicio lo hizo con un mensaje extremadamente polémico: "Las muñecas Barbie judías, con su ropareveladora y posturas vergonzosas, accesorios y herramientas son un símbolo dela decadencia del Occidente pervertido”.

Sin embargo, eso no impidió que la empresa decidiera ahora, por primera vez, representar a una celebridad islámica entre sus muñecas. La última Barbie de la línea Shero está inspirada en el esgrimistaestadounidense Ibtihaj Muhammad.

La primera muñeca con velo

En una entrevista reciente, Muhammad habló sobre sus experiencias como mujer islámica. Según contó, de pequeña se sentía incómoda con su cuerpo, pero "luegome involucré en deportes, y llegué a apreciar mi cuerpo". Cuando Mattelpropuso una Barbie basada en ella, se emocionó.Muhammad hizoalgunas solicitudes iniciales, incluyendo que la muñeca tenía que tener piernas grandes yfuertes, y que usaría delineador de ojos oscuro y el hiyab, el primero deBarbie. "Es algo que llevo puesto como que llevo una camisa o usopantalones", dijo, y agregó que esperaba que las niñas "se lo quitaran yprobaran con sus otras Barbies".

La polémica

Mientras para algunos es todo un avance que una empresa tan grande y símbolo de occidente represente la diversidad cultural incluyendo a una muñeca con hiyab en su colección, para otros, el hiyab es un símbolo de opresión a las mujeres y por eso no consideran una buena idea que una muñeca para niñas lo utilice. 

Quienes se sitúan del lado de esta última postura, recuerdan que incluso Muhammad contó en una ocasión que, cuando se inició en el deporte, su madre le sugirió el esgrima porque le permitía estar completamente cubierta. Seguramente, esta polémica aún no quedará sanjada.