¿No sería genial tener una casa que se limpia completamente por sí sola? Paredes, pisos, platos, ropa, todo se limpiará de forma completamente autónoma por medio de un sistema de aspersores y ráfagas de aire caliente. ¿Suena demasiado bueno para ser verdad? Alguna vez lo fue, pero probablemente nunca te enteraste.
Frances Gabe, una inventora estadounidense nacida en 1915, hizo realidad lo que ella consideraba “la casa del futuro”. Pero falleció el año pasado casi en total anonimato, lejos de su casa ideal y de su familia.
Según informa BBC Mundo, la historia empezó a mediados del siglo pasado, cuando Frances se hartó de que las mujeres fueran obligadas a ser amas de casa, un trabajo que consideraba “desagradecido y sin fin”, así que durante toda la década de los 70s se dedicó a construir una casa que se limpia por sí sola en Oregón, Newberg. Le costó 15.000 dólares de su bolsillo y poco más de 10 años, pero lo logró.
¿Cómo funcionaba la casa?
La casa de 1.000 metros cuadrados contaba con un sistema de aspersores colgados del techo que limpiaban pisos y paredes con una mezcla de agua y jabón, seguido de un chorro de aire caliente que secaba todo. Los pisos eran desnivelados para que el agua se escurriera hasta el desagüe. Los platos y la ropa también eran lavados por un sistema igualmente complejo.
En total, todos sus diseños dieron lugar a 68 patentes registradas, que lamentablemente perdió porque nunca obtuvo el apoyo financiero necesario para mantenerlos.Llegó a dar tours por su casa, a aparecer en las páginas de diarios como el New York Times y People, y ser considerada un genio visionario, pero a fin de cuentas sus inventos fueron olvidados e ignorados porque nunca consiguió el apoyo de ningún inversionista.
En los últimos años, su familia la obligó a mudarse a un geriátrico y a vender la casa, que hacía años había dejado de funcionar como debería.
Finalmente falleció el 26 de diciembre del año pasado, cuando una página web local dedicó apenas unas pocas líneas. La misma mujer que décadas antes había sido mundialmente famosa por sus inventos era ahora olvidada por todos.
Admiramos a Frances Gabe por su genialidad, y esperamos que en el futuro sus inventos reciban la atención que se merecen.