Según el tipo de precipitación, las nubes pueden formar granizo, pequeñas bolas de hielo que pueden variar de tamaño. Cuando es temporada de tormentas, estas bolas de hielo empiezan a caer en grandes cantidades. Dependiendo de la intensidad, pueden llegar a impactar con una gran fuerza sobre vehículos, viviendas y personas, por lo que son muy peligrosas. Descubre qué es el granizo, cómo se forma y cuántos tipos hay.
Hay que tener en cuenta que pasa por un proceso para formarse y la temperatura tiene mucho que ver. Además, hay países en las que no existe este tipo de precipitación, por lo que es un fenómeno que puede ser un tanto inusual en algunas regiones.
¿Qué es el granizo?
Es un fenómeno atmosférico bastante peculiar, ya que las nubes crean pequeñas bolas de hielo que, posteriormente, caen en forma de lluvias. Según la región, este tipo de precipitación puede presentarse en casi cualquier temporada del año y muchas veces, suelen caer con mucha violencia.
Ahora bien, según su tamaño, el daño provocado por el granizo aumenta dependiendo de la fuerza con la que cae, de hecho, en temporada de granizo lo recomendable es refugiarse. Hay que tener en cuenta que se trata de un tipo de precipitación en forma sólida, formada cuando se hacen presentes ciertas condiciones atmosféricas.
Aunque suelen ser pequeñas bolas de hielo, existen casos en los que se ha descubierto algunas más grande de lo normal. Enormes bolas de hielo que los científicos denominaron “Aerolito”, no obstante, la existencia de este tipo de granizo no está del todo confirmada, por lo que su descubrimiento sigue siendo dudoso.
Por otro lado, el agua que se encuentra dentro del granizo, por lo general, se deshace unos pocos minutos después precipitarse en el suelo. Esto puede llegar a ocurrir, ya sea por las temperaturas en el ambiente e incluso, por la fuerza con la que impactan en el suelo.
De hecho, la violencia del impacto suele ser tan grande que, una lluvia de granizo puede generar un gran destrozo. Especialmente, en los cristales de ventanas y lunas de vehículos, también pueden causar lesiones en las personas. Los cultivos también se ven perjudicados por el granizo, ya que además de provocar daños irreversibles en las plantas, también destrozan los frutos producidos por las mismas.
Sin embargo, la peligrosidad de una granizada depende, principalmente, de la intensidad y fuerza con la que caen del cielo y la duración de la lluvia. Existen muchos casos en los que las pequeñas bolas de hielo no caen tan violentamente. Por lo que no causan ningún daño, todo lo contrario, se convierte en u fenómeno muy hermoso para la vista.
¿Cómo se forma el granizo?
Ahora es momento de descubrir cuáles son las condiciones necesarias que se deben cumplir para que aparición de este fenómeno. Por lo general, el granizo se aparece junto a tormentas muy intensas, en este caso, las nubes encargadas de formar el granizo se les conoce como cumulonimbos.
Se trata nubes que se forman en posición vertical con ayuda del aire caliente que sube desde la superficie. Cuando el aire frío se cruza con la masa de aire caliente, provocará que este suba, ya que es el que tiene menor densidad. Ahora bien, en caso de que el ascenso se produzca totalmente en forma vertical, entonces se formarán cumulonimbos de tamaño considerable.
Asimismo, este tipo de nubes también se les denomina nubes de lluvia o de tormentas. Una vez que la masa de aire sube, se encuentra con una gran bajada de temperatura, producto del gradiente térmico ambiental. En este punto, la temperatura empieza a decrecer en altura, de la misma forma que ocurre con la presión atmosférica. Cuando alcanza las áreas donde la temperatura es inferior a los cero grados, inicia un proceso de condensación. Formando así, diminutas gotas de agua en el interior de las nubes.
Del mismo modo, cuando las nubes se forman de manera vertical, logran almacenar una mayor cantidad de gotas de agua. Lo que termina provocando inestabilidad atmosférica y por lo general, esto termina causando una tormenta. Por otro lado, cuando la temperatura en el interior de la nube es demasiado baja, además de gotas de agua, también se forman pequeñas bolitas de hielo.
Sin embargo, para que estas últimas se formen es necesario contar con varios núcleos de condensación higroscópica. Es decir, residuos de arena, polvo, partículas contaminantes y diversos gases. Una vez que las bolas de hielo superan el peso del aire en ascensión, las mismas terminan precipitándose en una violenta lluvia de granizo.
Las corrientes ascendentes y el granizo
Para que el granizo se forme, una de las condiciones necesarias pasa por las corrientes ascendentes. De hecho, una corriente de 32 kilómetros por hora es capaz de producir una bola de hielo del tamaño de un guisante, es decir, de casi 1,30 centímetros de diámetro. Asimismo, cuando la velocidad de dichas corrientes supera los 60 kilómetros por hora, el tamaño del granizo puede llegar a los 2 centímetros de diámetro.
Por último, las bolas de hielo más grande necesitan de corrientes de ascendentes más intensas. Ejemplo, para producir granizo del tamaño de una pelota de golf, la corriente necesaria debe superar los 85 kilómetros por hora. Las pelotas de golf suelen tener unos 4,44 centímetros de diámetro, por lo que el impacto de granizo de este tamaño puede llegar a ser muy peligroso.
¿Cuántos tipos de granizo hay?
Diferentes estudios han revelado que existen tres tipos de granizo, cada una con ciertas características. En este caso, se trata del Graupel o granizo blando, granizo pequeño y el granizo simple.
Graupel o granizo blando:
El Graupel, también conocido como granizo blando, se caracteriza por su aspecto de bolas blancas, muy similares a la nieve, justo cuando caen al suelo. Su textura suele ser quebradiza y su forma, además de redonda, también puede ser cónica.
Granizo pequeño:
Este tipo de granizo tiene cierta similitud con el anterior, no obstante, el granizo pequeño está formado por una capa de hielo vidriado.
Granizo simple:
Por último, el granizo simple, bolas de hielo de diferentes tamaños y capas, este tipo de granizo suele ser de varios centímetros. De hecho, son los que pueden llegar a provocar graves daños a causa de su impacto.
El tamaño entre las bolas de granizo suelen variar según su tipo, hay veces en las que son muy pequeñas, por lo que pueden moverse, fácilmente, en el interior de la nube. A medida que aumenta su número y las temperaturas bajan, el hielo no deja de crecer, esto se debe a que las partículas de agua se aproximan al núcleo de condensación.
Algunas bolas de hielo pueden alcanzar varios centímetros de diámetro, siendo estas son las primeras en caer durante una lluvia de granizo. De hecho, suele ser común observar grandes bolas de hielo caer al suelo al comienzo de una granizada. No obstante, después de algunos minutos de precipitación, el tamaño de las bolas de granizo empieza a disminuir.
Existen registros de grandes desastres provocados por intensas lluvias de granizo, uno de estos ocurrió en el año 1888 en Moradabad, una ciudad india. En ese entonces, se produjo una graniza donde cayeron grandes y pesadas bolas de hielo que parecían fragmentos de roca. La lluvia de granizo provocó la muerte de al menos 246 personas, las cuales recibieron un impacto directo sobre sus cabezas. Algunas de las víctimas fallecieron inmediatamente al ser impactadas, mientras que otras recibieron heridas muy graves que terminaron provocando su muerte.
Por otro lado, en el año 2010, se descubrió el granizo más grande jamás registrado, una bola de hielo de casi 4,5 kilogramos, el hecho se registró en Viale, Argentina. La granizada no dejó víctimas fatales, teniendo en cuenta el enorme tamaño y peso de la bola de granizo.
No hay que olvidar que las consecuencias de una granizada pueden ser muy graves dependiendo de la intensidad de la lluvia y el tamaño del granizo. Los cultivos se ven especialmente perjudicados, ya que los fragmentos de hielo impactan, directamente, sobre las plantas, dañando sus flores, frutos e incluso a la misma planta. Las lunas de los vehículos también pueden llegar a recibir series daños y ciertas infraestructuras como edificios, tiendas y viviendas. Sin olvidar que un impacto directo de un granizo de gran tamaño, puede causar la muerte instantánea a una persona.
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Fuentes: Muy interesante, Iagua, Meteorología en red.