La famosa actriz Sandra Bullock, al parecer, ya tomó la decisión de no volver a las pantallas, por lo menos por un largo tiempo. En una reciente entrevista televisiva con The Hollywood Reporter, explicó que se retira por razones médicas: posee un trastorno cada vez más conocido y diagnosticado. Se lo conoce como sindrome de desgaste laboral o burn out, que significa " quemado" en inglés.

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“No quiero estar en deuda con el horario de nadie más que el mío. Estoy tan ‘quemada’. Estoy tan cansada y no soy capaz de tomar decisiones saludables e inteligentes y lo sé. El trabajo siempre ha sido constante para mí y he tenido mucha suerte, pero me di cuenta de que posiblemente se estaba convirtiendo en mi muleta. Era como abrir una nevera todo el tiempo y buscar algo que nunca estuvo ahí. Quiero estar en casa. Solo quiero estar en casa… Porque siempre estaba corriendo, siempre estaba corriendo hacia lo siguiente. Solo quiero estar presente y ser responsable de una cosa”.

¿Qué es el sindrome del Burn Out?

El sindrome del burn out, también llamado síndrome de desgaste profesional o de estar quemado y es la respuesta que da un trabajador cuando percibe la diferencia existente entre sus propios ideales y la realidad de su vida laboral. Es un mal conocido por la medicina, que fue descripto en 1974 y está cada vez más difundido.

Afecta más que nada a trabajadores muy exigidos durante períodos largos de tiempo, aunque también puede desencadenarse por cualquier causa o conjunto de causas que provoque estrés crónico.

El agotamiento emocional, físico y mental es característico de quienes tienen este síndrome.

Comienzan a perder interés por casi todo: trabajo, diversión, afectos. Se vuelven irritables, cínicos, no se sienten productivos, baja su autoestima. Este síndrome se puede iniciar a través de insomnio, períodos cortos se desorientación, sensación de mente en blanco y otros síntomas alarmantes como taquicardia, hipertensión, gastritis, trastornos alimenticios, pinchazos en el pecho.

El síndrome de burn out fue reconocido en 2019 como un trastorno mental en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) elaborada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El organismo lo asocia a la sección “problemas asociados al empleo y desempleo” y lo describe como “un síndrome resultante de un estrés crónico en el trabajo que no fue gestionado con éxito”.

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¿Cómo puede tratarse?

Generalmente quienes tienen este síndrome tienen una sobrecarga laboral o emocional constante y esto es lo primero que se debe corregir. La mayoría requiere tomar licencias, dejando espacio para el descanso, la familia y el tratamiento para recuperar tanto la energía física como el entusiasmo. Siempre es conveniente que estas personas reciban apoyo médico y psicológico, para trabajar sobre hábitos y patrones de comportamiento que pueden volver a activar este problema.

Fuente: Pronto/Mental Health.