El pasado martes 22 de marzo, el Ayuntamiento de Barcelona aprobó una moción que la convierte legalmente en la primera ciudad Veg-friendly del mundo.
Desde ahora, la ciudad promoverá hábitos alimentarios más éticos y saludables, y la idea es que estos cambios contribuyan a su desarrollo económico y social.
Los responsables de la iniciativa sostienen que asumen el compromiso de fomentar y difundir en la ciudad información sobre las opciones de consumo veganas y vegetarianas, haciendo de Barcelona un punto de encuentro para emprenderores, ONGs, consumidores e inversores interesados en el comercio mediano y local dentro del rubro vegano y vegetariano.
Se espera que éste sea solo el comienzo, y que la campaña se extienda muy pronto a otras ciudades del planeta.
La declaración del status de Veg-friendly no es una mera formalidad, sino que implica poner en marcha una serie de medidas que promuevan hábitos de consumo saludables y éticos, que fueron asumidas por diferentes partidos políticos.
Entre éstas se encuentran la publicación de una guía vegetariana de la ciudad, digital y en papel, y la creación de una App informativa para vecinos y turistas.
Los promotores de la campaña sostienen que, aunque Barcelona no era por el momento un destino elegido por los turistas vegetarianos y veganos, ya contaba con una serie de comercios locales pequeños que podían satisfacer esas demandas, y que lo que ahora cambiará es que la información sobre ellos será mucho más accesible; además de que se tomarán acciones de promoción y comunicación de estas alternativas que posicionen a Barcelona como uno de los lugares favoritos para los vegetarianos y veganos del mundo entero.