A todos nos pasó alguna vez de querer bajar algunos kilos de más haciendo una dieta o ejercicio, y desear que por arte de magia la báscula nos muestre inmediatamente el resultado que esperamos. Pero las cosas no son tan veloces, y necesitamos paciencia e información. En primer lugar, ¡bajemos la ansiedad!
¿Por qué necesitamos información? Porque la hora en la que te pesas puede no ser la más adecuada y eso puede empeorar tu ansiedad o frustrarte porque crees que los resultados son distintos de los reales.
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Además, el peso como número no es un indicador tan certero. La cifra de la báscula no indica nuestra cantidad de masa muscular o grasa, por ejemplo. Cada persona tiene sus propios requerimientos y su peso saludable, por eso lo más indicado es acudir a un profesional que guíe y asesore.
Por otro lado, pesarse constantemente puede obsesionarnos sin sentido. El peso corporal puede variar durante el día. Por eso, según los especialistas, quien quiere controlar su peso debe subirse a la báscula siempre en el mismo momento del día, para que el cuerpo se encuentre en aproximadamente las mismas condiciones.
De acuerdo con los médicos, las horas de la mañana son el mejor momento para pesarse, antes de desayunar.
Además, se debe usar siempre el mismo aparato, ya que no todos funcionan de la misma manera. También se aconseja hacerlo con ropa similar. Por ejemplo, si te has subido descalzo, sigue haciéndolo así. Sobre esto último, es mejor hacerlo en ropa interior, por lo cual es mejor que el aparato esté en casa.
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Errores al pesarse
Los expertos también recomiendan no pesarse todos los días (una vez por semana es suficiente), ya que hay factores que pueden hacer que el número de la báscula no sea tan exacto. Algunos de ellos son:
- Hacerlo luego de tomar mucha agua.
- En mujeres, pesarse durante el período menstrual.
- Pesarse luego de comer en abundancia o de habernos excedido con la sal.
- Pesarse con estreñimiento.
Recuerda: cuidarnos es saludable y es un acto de amor propio, pero obsesionarnos no lo es. Nuestro peso debe ser acorde a nuestra altura, nuestra edad y nuestras actividades. No te dejes guiar por estereotipos de belleza irreales. Lo importante es que estés sano y mantengas buenos hábitos de salud.
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Fuentes: