Las personas por lo general tienen apego emocional, una forma de vínculo que puede convertirse en tóxico, puesto que la dependencia de las reacciones del otro lleva a mantener una relación distorsionada: si el otro no se manifiesta de la forma en que “yo” espero o creo que debería hacerlo, te sientes mal, abandonado y dejado de lado. En esto subyace la falsa creencia de que si la otra persona se comporta de la forma en que “yo espero”, volveré a ser feliz y a sentirme querido.
Sin embargo, en el mundo de los vínculos de todo tipo -desde el amor de pareja hasta el afecto de familia, la amistad y las buenas relaciones profesionales- están llenas de códigos implícitos o explícitos.
En los explícitos, nos damos cuenta enseguida por su evidencia. Sin embargo, hay muchas otras formas de decir “te quiero”, “te aprecio”, “eres importante para mí”, “eres una persona especial”, “te considero en forma particular”, y que no siempre se expresa hacia fuera.
Hay muchas formas de decirlo con gestos, actitudes y la simple presencia; la contundencia de una mirada cómplice, o el acompañamiento en momentos de dificultad.
Aquí encontrarás 100 formas de decir “te quiero” que muchas veces quizás dejas pasar por alto. Incluso, son 100 formas que tú mismo puedes expresar a otros -y seguro que lo haces casi sin darte cuenta:
- Una mirada cómplice.
- Abrazar con fuerza.
- Reír sin motivo.
- Guiñarte un ojo cuando estás de conquista.
- Mandarte un chiste para hacerte sonreir.
- Dejar el desayuno listo a la mañana.
- Cocinar algo rico e invitarte a último momento.
- Organizar un cumpleaños o salida sorpresa.
- Acompañarte a hacer un trámite engorroso.
- Tranquilizarte en momentos de zozobra.
- Preguntarte cómo te sientes.
- Recordar hechos dolorosos del pasado, y evitar traerlos al presente.
- Hacerte un regalo, aunque no sea tu cumpleaños.
- Pasarte un artículo del periódico sobre un tema que te interesa.
- Compartir un contacto profesional.
- Darle “Me gusta” aunque lo que postees en tu red social no sea para festejar.
- Hacerte saber que está presente contigo todo el tiempo.
- Acompañarte al médico.
- Asentir cuando le cuentas algo doloroso para ti.
- Ser empático más allá de lo que suceda.
- Decirte “te extrañé”.
- Mandarte un audio gracioso para hacerte sonreír.
- Tomar una foto en el mismo lugar donde se conocieron.
- Comprar tickets para un espectáculo que quieran compartir.
- Invitarte a una comida en un lugar especial.
- Abrigarte si te quedas dormido en el sofá.
- Encargarse de tus plantas o mascotas si sales de viaje.
- Descubrir “ese” lugar que te va a encantar.
- Cuando te cuentan un secreto.
- Poner música cuando están juntos ¡y justo son “esas” canciones especiales!.
- Que deje una carta en el buzón de tu casa.
- Que comparta sus sueños y anhelos más profundos.
- Que comparta sus miedos y desafíos.
- Que te pida un consejo.
- Que comparta algunas contraseñas para ver TV o escuchar música.
- Que te espere cuando sales de trabajar para hacer un encuentro rápido.
- Que haga un pastel o torta, y te prepare un buen trozo para llevarte a casa.
- Que te deje libre de elegir lo que creas mejor para ti.
- Que te impulse a ir por tus metas y sueños.
- Que te diga lo importante que eres para el/ella.
- Cuando te envía un mensaje por Whatsapp con un código que sólo ustedes entienden.
- Cuando se da cuenta de que te cortaste el cabello y te dice lo bien que te sienta.
- Cuando te advierte que estás a punto de pasarte con esa copa demás…
- Que no te juzgue.
- Que te cuide, por sobre todas las cosas.
- Que te acompañe cuando estás enfermo.
- Que te consuele cuando sientes pena.
- Cuando está presente en los momentos relevantes de tu vida.
- Te asiste cuando te mudas.
- Te ayuda a ordenar la casa luego de una fiesta.
- Se ofrece a lavar los platos luego de una reunión con muchas personas.
- Llega más temprano para ayudarte a organizar un evento especial.
- Cuando te enseña a mejorar tu currículum.
- Cuando te felicita por algo menor, aunque significativo para ti.
- Riega las plantas sin que nadie se lo pida, cuando se da cuenta que les falta agua.
- Te avisa que tienes algo verde entre tus dientes.
- Te mira con ojos chispeantes cuando comparten una picardía.
- Te explica algo que no conoces.
- Se esfuerza por ayudarte a crecer y vencer tu resistencia interna en algo que quieres lograr.
- Te paga la comida cuando tú no tienes dinero ese día.
- Te invita a armar un viaje juntos.
- Te felicita por tus logros y avances en cualquier ámbito.
- Se mantiene cerca cuando sabe que estás vulnerable.
- Te presta señal de WiFi.
- Te pasa su celular si te quedas sin batería.
- Se ofrece a traerte algo de un viaje en el exterior.
- Cuida de tus niños cuando quieras tomar un recreo.
- Te pregunta qué te pasa, y sabes que estará bien contárselo.
- Cuando alguien confía en ti.
- Cuando se distancian y al tiempo vuelven a relacionarse desde la comprensión, el amor y el perdón.
- Cuando no te envidia.
- Cuando no siente rencor por algo negativo que los pudo distanciar.
- Trae algo de beber cuando te visita en casa.
- Cuando está atento a ti, sin haber motivo especial.
- Pone límites a otros que hablan mal de ti.
- Apoya tus causas sociales, aunque no las comparta.
- Sonríe al verte.
- Te presenta a sus mejores amigos.
- No siente celos cuando te relacionas con sus amigos y afectos (incluso sus ex).
- Comprende tus espacios personales y de soledad.
- No insiste en buscarte pareja a toda costa si es que estás solo/a.
- Te ayuda con lo que esté a su alcance.
- Es honesto y genuino contigo.
- Se mantiene al tanto de cómo están tus personas cercanas, y te acompaña en lo que pueda.
- Te defiende ante otros, y en privado puede indicarte lo que, a su juicio, podrías mejorar al respecto.
- Se ríe de tus chistes malos.
- Te trae un libro que le gustó mucho, y no le importa si a ti no te gusta.
- No se ofende si regalas los regalos que te hace, si es que no te gustan.
- Te aguanta en las distintas etapas de la vida.
- Te da un masaje sin que lo pidas.
- Te ayuda a ordenar la casa mientras conversan.
- Agradece por lo que comparten juntos.
- Se pone a disposición frente a distintas situaciones.
- Sabe tus gustos, y hace lo posible para conciliarlos con los suyos.
- Si ve algo que te podría gustar a ti también, y está a su alcance, lo comparte contigo.
- Te felicita por lo que haces, sientes o logras.
- Comparte tus posteos en las redes sociales, o les da un “me gusta” para hacerte sentir su presencia.
- No te ahoga.
- Aprecia tu libertad (y la suya).
- Sabe poner límites en el vínculo, buscando que sea algo sano para ambas partes.
Y tú, ¿qué otras formas de decir te quiero agregarías a esta lista?
Sobre el autor
Daniel Colombo es Master Coach especializado en CEOs, alta gerencia, profesionales y equipos de trabajo; comunicador profesional; conferencista internacional; autor de 21 libros.
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