Cada vez más personas son conscientes de cómo cuidar al ambiente y aprovechar los recursos que nos proporciona, de manera respetuosa. Una de las opciones para hacerlo viene de la mano de la utilización de la energía solar mediante la instalación de paneles fotovoltaicos.

En este artículo, reconoce los beneficios de instalar paneles, aprende cómo funcionan y sé parte de un necesario cambio de perspectiva.

Derribando mitos

Comencemos por erradicar ciertos mitos que se han construido en torno a los paneles solares: no es costoso instalarlos en tu hogar, como tampoco es necesario ser un técnico especializado para hacerlo.

Lo que sí es cierto, es que una vez que incorpores los paneles solares a tu vida, ésta cambiará exponencialmente para bien, y en muchos sentidos. ¡Sigue leyendo para saber de qué se trata!

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Hace un tiempo, compartimos en Bioguia un artículo en donde te explicamos paso a paso cómo puedes construir un panel solar tú mismo.

¿Notaste lo simple que es? Podemos decir con ello que se puede desterrar cualquier temor de hacerlo mal, puesto que, de seguir el paso a paso y comprender cuál es la función de cada una de sus partes, entonces tendrás un gran porcentaje del trabajo hecho. Sí, podrás decirle adiós al mito de que es algo complejo y técnico.

Claramente, no se trata de una manualidad, pero si te propones hacerlo tú mismo, y con una inversión primera en materiales, lograrás abastecer todos los artefactos de tu hogar con el infinito recurso energético que te provee el sol: inagotable y de muy bajo costo.

Es el momento de quitar de escena el segundo mito sobre la implementación de la energía solar, debido a que si te propones instalar tus propios paneles, el costo en relación a los gastos fraccionados en largo plazo de la energía corriente se reduce, y mucho.

Energía renovable y low cost

Tenemos una tendencia a pensar que todo aquello que es de bajo costo es de mala calidad. No es el caso cuando hablamos de energía renovable, puesto que solo estamos canalizando algo que la naturaleza nos provee, es decir, tomamos del sol una energía que está allí y la convertimos, mediante estas celdas solares, en energía renovable.

El proceso comienza, en primera instancia, gracias a la existencia del sol y su emisión de luz, mientras que el resto sucederá con ayuda de la tecnología.

Según un estudio sobre la industria energética que Bloomberg Technology realizó en 2016, el valor de las placas solares fotovoltaicas bajó un 75% en aquel año. Con ello engrosa las razonas por las cuales, aún cuando hay que invertir en su implementación, resulta más económica que las fuentes de energía como el petróleo o el gas.

Pero si te preguntas en cuánto se traduce todo esto en números, pues no lo dejaremos en el mundo de los supuestos. Tomaremos las palabras de Gustavo Tavolaro, Presidente del Colegio de Técnicos de La Plata, que en una entrevista radial en FM Cielo explicó: “Con tres paneles solares puedes alimentar el consumo de una vivienda de unos 60 mts cuadrados: un par de televisores, una heladera, un ventilador y todas las luminarias”.

En lo que respecta a costos, señaló que “para una vivienda tipo bastarán unos 100 mil pesos para instalar un inversor, tres paneles y un banco de batería”. Todas estas son partes necesarias para que los paneles funcionen correctamente y en éste artículo te contaremos cuál es la función de cada uno por su parte.

“Puedes tener energía solar para generar energía durante el día y la inyectas en tu vivienda. Al final del mes verás una reducción en el costo de tu factura de luz”, concluyó Tavolaro.

Conoce más sobre este sistema de sostenibilidad o desarrollo sustentable que, una vez que lo implementes en tu casa, cambiará de por vida la forma en la que aprecias el sol.

Cómo funcionan los paneles solares

La transformación de la luz solar en electricidad no es un acto mágico, sino un algo que se conoce como conversión fotovoltaica, y de ahí que los paneles lleven ese rótulo también.

Para que esta conversión se produzca, no solo se requiere de la luz solar, sino también de las celdas solares del panel que, cuando están expuestas al sol, reproducen una corriente eléctrica de baja intensidad.

¿Cómo es que basta con tener tres paneles para proveer de energía una casa de, al menos, 60 metros cuadrados? Cada panel contiene varias celdas solares que están conectadas entre sí. Ante la exposición al sol, se produce una tensión eléctrica suficiente como para, por ejemplo, encender una lámpara. Tomando esto como base, podemos decir que, para cargar una batería de 12 voltios es necesario un panel de 18 voltios que contenga 36 celdas solares de medio voltio.

Si lo quieres más claro, toda la intensidad que absorben los componentes de cada celda solar generan, en definitiva, una tensión eléctrica capaz de proveer de corriente a un hogar.

Así funcionan los paneles solares

Hasta aquí todo suena maravilloso. Pero, ¿por qué y cómo unas simples celdas solares pueden transformar la luz en electricidad? La respuesta a ese interrogante se encuentra en los materiales con los que se componen.

Las celdas solares están hechas de materiales semiconductores, siendo el más utilizado y de mayor calidad, el silicio cristalino. También hay celdas que se construyen con arseniuro de galio, pero no absorbe tantos fotones (partículas que componen la luz) como las hechas con silicio.

Estos materiales permiten conducir la electricidad o aislarla, de acuerdo a lo que se indique como acción, pero en definitiva es lo que provee a la celda de lo necesario para absorber la energía solar.

La ubicación de los componentes debe hacerse intercalando un cristal de carga negativa, luego otro cristal de carga positiva, y así.

La exposición a la luz permite que se muevan los electrones de los cristales con materiales de carga negativa, hacia el sector donde están los de carga positiva, generando así un campo eléctrico dentro del panel solar.

Para decirlo de forma sencilla, la energía de los fotones, al entrar en contacto con los electrones del material semiconductor, produce un flujo de electrones, mejor conocido como corriente eléctrica.

Esto que parece muy técnico e inicialmente decíamos que no era magia, es lo que hace que una celda convierta la energía solar en electricidad, y un panel, constituido por muchas celdas, genere la electricidad suficiente para una casa, lo cual no es poco.

¿Podrías llevarlo a la realidad de tu hogar? Continúa leyendo para saber cómo hacerlo.

Tus primeros pasos

Se dice que el uso de la tecnología fotovoltaica es ideal para dar los primeros pasos de sustentabilidad en tu hogar. Esto es así porque se trata de un recurso que permite generar un autoconsumo eléctrico que no tiene impacto negativo sobre el ambiente.

Además, no recibirás nunca más una factura de luz y generarás un ahorro importante que impactará en tu calidad de vida. Más allá de la conveniencia económica, se trata de una energía limpia que está encontrando cada vez más usuarios dispuestos a dar el paso.

Antes te contábamos algunas cuestiones técnicas sobre el funcionamiento de los paneles solares. Es el momento de que sepas cómo llevarlo a tu realidad.

Una vez que las celdas transforman la luz en electricidad, el resultado se traslada hacia los dispositivos o sistema eléctrico que lo requiera en un hogar. Para ello es necesario contar con otros componentes, además de los paneles, que forman parte del sistema y que aseguran su funcionamiento.

Presta atención en este punto si estás pensando en montar tus propios paneles solares y sabrás cuáles son estos componentes que mencionamos como tan necesarios.

Otros componentes del sistema de energía solar fotovoltaico

es un dispositivo que transforma la corriente continua en alterna a 230V 50Hz y la gestiona de acuerdo a la demanda y la producción. Oportunamente, acude a fuentes externas cuando sucede una demanda excesiva o tan solo para proteger el acumulador manejando con ello la carga de la batería.

Aquí es donde se acumula la electricidad que los paneles expiden de manera de poder usarla sólo cuando es conveniente, el almacenado se mide en Amperios hora (Ah). Es necesario saber cuánta electricidad consume un hogar en promedio para saber qué batería comprar de acuerdo a la capacidad de energía que puede acumular.

Protege a la batería de sobrecargas o descargas imprevistas que puedan dañar el sistema de almacenamiento. Es el encargado de cortar el suministro a las baterías cuando estas están cargadas y lo percibe mediante un monitoreo constante de la tensión en las baterías.

Orientación e inclinación

Pese a lo maravilloso que puede sonar esto de los paneles solares, y lo fácil que es que pongas manos a la obra hoy mismo para montarlos y así aprovechar de una buena vez por todas sus beneficios, hay un detalle no menor que es necesario que evalúes antes que nada: la orientación y el lugar.

Este es quizás el único momento en el que sí te recomendamos que acudas a un profesional, ya que es necesario analizar el lugar correcto donde se colocaría. Aunque, por lo general, se ponen sobre los techos, es fundamental ver hacia dónde hay que orientarlo y con qué inclinación para aprovechar este recurso de la forma más eficiente posible.

Aunque parezca obvio, no está de más decir que el lugar donde se los debe colocar es allí donde haya exposición al sol o irradiación por más horas. También vale considerar que la orientación hacia el norte será la adecuada para quienes viven para los países del hemisferio sur, mientras que la orientación sur es ideal para los del norte.

La orientación del panel solar es determinante para su aprovechamiento

Aún así, existe una forma más efectiva de aprovechar los rayos solares, pero requiere de la implementación de seguidores solares o trackers, cuya función es perseguir los rayos durante el día, ajustando los paneles automáticamente. Si eliges esta opción, tendrás que invertir un poco más en su instalación y contar con la ayuda de un técnico especializado.

Ahora sí: ya estás listo para el siguiente paso, la instalación.

Cómo instalar paneles solares en un hogar

Sigue este paso a paso:

Más allá de la posición en la que tiene que estar, también debes saber que el panel tiene que instalarse en una estructura que hará de soporte.

Una vez instalada la estructura, considera que el o los paneles tienen que estar conectados en serie y luego conectar con el regulador de carga, que tiene como misión evitar que las baterías se sobrecarguen o descarguen demás. Además, medirá el almacenamiento de la energía en las baterías.

Esto también se conecta en serie y este enlace permite la fluidez de la energía que se consume. Atención: coloca el regulador cerca de la batería, por seguridad.

En caso de proveer de energía solar y alterna a tu hogar, es necesario que el regulador cuente con un inversor que es el que permitirá el cambio entre la corriente continua del sistema fotovoltaico a la corriente alterna.

¿Qué debes saber antes de comprar paneles solares?

Seguro estés entusiasmado y quieras comenzar con la instalación de tu propio panel. Pero tienes que comprarlos y te encuentras con una inesperada oferta.

Lo más importante que tienes que saber es cuánto consumo de energía quieres cubrir, en dónde estará ubicado y, fundamentalmente, cuál es el presupuesto con el que cuentas para ello. Dicho esto, agregamos algunos datos que pueden servirte para tomar la decisión.

Si te propones hacer todo el montaje por tu cuenta, necesitarás saber el número de células de las celdas solares y la tensión, aún más cuando tramas un proyecto de autoconsumo fotovoltaico. ¿Por qué? Es que dependerás de la capacidad de las baterías para elegir el tipo de panel. Por ejemplo, dos baterías monoblock son ideales para paneles solares de 24v, este tipo de baterías son las ideales para instalaciones fotovoltaicas aisladas.

También es bueno saber la potencia de salida de la energía generada en el panel, lo que será un dato un tanto inestable debido a que dependerá de las horas de sol y la radiación solar. Sin embargo, también es posible considerar qué paneles comprar teniendo en cuenta la potencia de salida a temperatura de operación nominal, es decir, en condiciones reales, lo que nos lleva a depender solamente de las condiciones climatológicas.

Otro dato importante es cuánta potencia de salida tolera el tipo de panel que elijas ya que esto podría afectar la fluidez del consumo diario de energía y la forma en que se acumula, limitando su vida útil de no proceder de la forma correcta. La potencia se mide por metro cuadrado del panel que recibe una irradiación de 100W/m2.

Debes saber que, siendo muy minucioso, tu compra del panel también puede estar determinada por dos datos muy específicos. Uno es el coeficiente de temperatura de la potencia, que es el que determina cuánta de ella pierde el módulo fotovoltaico por cada recepción que haga por encima de los 25°, de esta forma podrás aprovechar al 100% todo el recurso energético acumulado.

Otro es el NOCT, o temperatura de operación nominal de la célula, cuya importancia radica en que mientras menos sobrecaliente más vida útil tendrá, pero mejor aún, será más eficiente el uso. Se mida con la temperatura del ambiente de 20° y la irradiación de 800W.

Todos estos datos los verás en la ficha técnica fotovoltaica. Son esos términos que muchas veces no comprendemos a simple vista, pero que luego nos generan dudas cuando estamos con el panel en las manos listo para instalar.

Hemos conocido la importancia de utilizar paneles solares, cómo están construidos, sus partes y la función de cada una, desde las celdas solares hasta los inversores, para combinar corriente alterna con continua.

¿Ya estás decidido a colocar tu propio panel solar? Antes te daremos algunas recomendaciones para su mantenimiento.

¿Cómo prolongar la vida útil de los paneles solares?

A lo largo de este artículo, te hemos contado de qué manera hacer más eficiente su uso, enseñándote cuál es la función de cada una de las partes que componen los paneles solares para que no sólo apliques un sentido de sostenibilidad o desarrollo sostenible en tu hogar, sino que percibas el verdadero cambio de vida que este propicia.

Otra forma de optimizar su uso y prolongar su vida útil es con un mantenimiento adecuado. Ten en cuenta estas recomendaciones:

La limpieza de las células solares se realiza casi espontáneamente con ayuda del viento y la lluvia, pero atención con esto, porque no siempre pueden limpiarlos, sino también pueden arruinarlos. Esto sucede con las lluvias ácidas o vientos marinos. En ese caso, la limpieza hay que hacerla de forma manual con agua limpia y sin detergentes. No usar agua a presión ni fría, con que sea potable y a temperatura ambiente bastará.

Depende del lugar en donde vivas. Quienes habitan en zonas marítimas, tendrán que limpiarlos más seguido, mientras que aquellos que viven en regiones con mucha vegetación deberán ocuparse de que no se estropeen con restos de plantas.

Si decides que una empresa de limpieza se ocupe de esto por ti, puedes hacerlo, pero verifica que esté homologada para estas acciones.

El aprovechamiento de las energías renovables ya no es solo una tendencia ecologista, y el hecho de que cada vez sea más accesible económicamente, así como práctico su montaje, permite que las personas comprendan cuán beneficioso es el uso de paneles solares en los hogares.

En definitiva, los grandes cambios en el mundo siempre empiezan dentro de nuestras casas. ¿Te sumas para ser parte de este cambio?

Fuentes:

Inarquía

Infocielo