Un grupo de científicos crean una “superenzima”. Se trata de un descubrimiento muy oportuno, ya que se dice que come plástico seis veces más rápido que antes. La idea es lograr eliminar la enorme cantidad de este material desechado por los humanos.
Sin dudas, este descubrimiento abre una gran cantidad de expectativas. De hecho, se trata de la unión de dos enzimas ya existentes que eran capaces de descomponer el plástico. ¿Se puede mejorar la velocidad? ¿Lograr otra enzima incluso más efectiva?
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Todo inicia con un insecto devorador de plástico
En un vertedero de plástico de Japón, se halló una oruga que se alimentaba de plásticos. Para ello, liberaba una sustancia que descomponía este material y lo hacía digerible. Desde semejante hallazgo, los científicos se han esmerado en lograr replicar esa enzima.
Ciertamente, el insecto antes mencionado genera una enzima llamada PETasa. Con la ayuda de esta sustancia, la oruga diluye la superficie dura de las botellas plásticas. Lo interesante es que es un proceso natural, el cual se procura rehacer en laboratorios.
Un estudio publicado en el National Academy of Sciences
Se trata de una revista de ciencias de Estados Unidos. Ahí se relata que, a partir de la PETasa original, se ha creado otra enzima que multiplica la velocidad de descomposición de materias plásticas.
Lo anterior se logra gracias a la combinación de la PETasa con otra enzima del mismo insecto. Esta segunda enzima es usada para devorar materia vegetal, pero combinada la anterior es bastante agresiva paras las piezas plásticas.
El resultado ha sido catalogado como una “superenzima”. Se espera tenerla bajo control y pruebas. Si todo resulta según lo planeado, se espera usarla para eliminar grandes cantidades de contaminación en el planeta.
El problema de los plásticos y la contaminación ambiental
Sucede que es un material con dos problemas: en primer lugar, en algunos casos no es biodegradable y, por otro lado, tarda mucho en degradarse (hasta 500 años). Por ende, permanece mucho en la naturaleza y causa estragos en los ecosistemas.
Hasta ahora, se han planteado soluciones como las de Alemania, prohibiendo los plásticos de un solo uso. Igualmente, diversas opciones para reciclar este material como lo es la opción de los ecoladrillos.
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Con la reciente opción de enzima ahora sintetizada en laboratorios, se puede optar por eliminar gran cantidad de desperdicios en el mundo. Por eso, se trata de una noticia que genera muchas esperanzas para un mundo mejor.
¿Podremos eliminar la contaminación plástica de la Tierra? Esta noticia demuestra que hay nuevas maneras de lograrlo. Solo resta esperar algo de tiempo y que la ciencia encuentre las respuestas. ¡Lo lograremos!
Fuentes: