Ser más amigables con el medio ambiente, es una tarea que corresponde principalmente a los adultos y que estos, deben enseñar a los más jóvenes. Para lograrlo, lo mejor es seguir estos 7 consejos para criar hijos que sean más responsables con el cuidado medioambiental.

Criar niños que sean respetuosos con el medio ambiente es posible, se trata de un trabajo que requiere de mucha paciencia y amor, pero que se puede lograr. Todo gira en torno a una serie de gestos bastante simples que, ayudarán a los pequeños a comprender los beneficios de cuidar el ambiente.

[También te puede interesar: 4 jóvenes (Sub 25) que encabezan la lucha contra el cambio climático, además de Greta Thunberg]

¿Cómo enseñar a los niños sobre el cuidado del medio ambiente?

Cuidar el medio ambiente no tiene por qué ser solamente una responsabilidad de unos pocos. De hecho, debería ser una tarea en la que participen todos, desde abuelos hasta padres y sobre todo, los hijos. Ya que estos últimos, se convertirán en el futuro de la próxima generación.

Puede que educar a los más pequeños sobre el medio ambiente parezca un trabajo bastante arduo. Incluso con la existencia de diversas instituciones que pueden prestar su apoyo en casos como estos.

Sin embargo, el criar a los hijos para que sean más amigables con el medio ambiente, es un trabajo que tienen que realizar todos los padres. Mientras que los educadores, se encargarán de reforzar cada uno de los valores inculcados por la familia de los más pequeños. Así como educar correctamente sobre la responsabilidad de cada individuo cuando se trata del cuidado medioambiental.

Hay que tener presente que, la curiosidad y el aprendizaje, siempre van en una misma dirección cuando se educa a los niños. Nunca está de más hacerle preguntas, escuchar todo lo que tengan que decir y sobre todo, retroalimentarlos. Una de las mejores formas de ensañar de los más pequeños, es por medio de ejemplos, seguidos de una breve explicación acerca del motivo por el que se lleva a cabo la acción.

Es por esta razón, que te mostraremos 7 consejos para que tus hijos sean más amigables con el medio ambiente.

1. Reduce las compras innecesarias y fomenta el consumo responsable

Evitar las compras innecesarias puede convertirse en uno de los primeros ejercicios que puedes enseñar a tus hijos para que sean amigables con el medio ambiente. Hay que tener presente, que los malos hábitos de consumo son perjudiciales para planeta.

Por lo tanto, lo más recomendable, es optar por el consumo responsable, ya que sirve de claro ejemplo en la crianza de los niños. Lo ideal es descartar cualquier producto que sea de un solo uso, como los plásticos, adquirir aquellos que tengan una vida útil más larga y que, una vez acabe, puedan ser reciclados.

Asimismo, el consumo responsable no tiene que ver solo con el aspecto económico o en la cantidad de compras que se pueden realizar en un corto tiempo. Esto también abarca los recursos de origen natural que se usan a diario, como es el caso del agua y la electricidad. Además de la disminución de aquellos materiales que son dañinos para el medio ambiente, como el plástico.

2. Promueve el reciclaje

Cuando se trata de impulsar el cuidado del medio ambiente en los niños, el reciclaje tiene que ser una de las prioridades. De hecho, junto al consejo anterior, reciclar es parte fundamental en una familia con hábitos de vida sostenibles.

Por lo tanto, lo mejor es evitar la compra de productos que no pueden ser reciclados y optar por aquellos que si puedan serlo. Si es un caso donde la familia tiene varios hijos, una de las formas de incentivar el reciclaje, es dar las prendas de ropa que usaban los hermanos más grandes a los más pequeños.

Una vez que las prendas ya no puedan ser utilizadas por ninguno de los hijos, lo recomendable es donarlas, esto en caso de que aún estén en buenas condiciones. De esta forma, la vida útil de la ropa de los niños se alargaría mucho más, como resultado, se ahorraría mucho dinero.

Asimismo, para enseñar a los niños a ser más amigables con el medio ambiente, es muy importante mostrarles que se puede reciclar y que no. De este modo, podrán desarrollar una mejor conciencia sobre el reciclaje a temprana edad. Con el paso del tiempo, lo convertirán en un buen hábito de vida cuando sean mayores y luego pasarán a ensañarlo a sus propios hijos.

3. Hacer compost casero es una gran opción

Sin duda alguna, una de las mejores formas de descomponer los residuos orgánicos en casa de manera natural, es a través de un compost casero. Además de ser muy sencillo de hacer, permite que los residuos orgánicos se descompongan por medio de un método controlado.

Ahora bien, los niños suelen ser curiosos por naturaleza, por lo que pueden aprender mientras se divierten. En este sentido, si tu vivienda dispone de un jardín, entonces puedes elaborar la compostera con ayuda de los más pequeños.

Si no cuentas con un jardín, pero tienes un balcón, entonces no tienes de que preocuparte, ya que también servirá. Solo tienes que buscar información acerca de cómo hacer compost casero y listo, la verdad es que este tipo de compostaje es bastante sencillo de hacer y no requiere de mucho espacio.

4. Remplaza las carnes por alimentos verdes

Para tener un planeta sano y al mismo tiempo sustentable, es necesario mejorar los hábitos alimenticios. Por lo tanto, es de vital importancia reducir el consumo de productos de origen animal y reemplazarlos por alimentos más saludables.

No obstante, cuando se trata lo que comen los niños, puede que al principio sea un poco complicado, pero no imposible. En este sentido, para disminuir el impacto ambiental provocado por ciertos alimentos, es esencial tener un mejor papel desde el punto de vista del consumidor.

La mejor alternativa, en estos casos, es empezar una dieta que se base principalmente en el consumo de plantas y sus derivados. Así como también, añadir a la alimentación nuevas fuentes de proteínas, especialmente de origen vegetal. Esto mientras se disminuye considerablemente la carne, sobre todo la carne roja, ya que es más perjudicial para la salud y para el planeta.

Si optas por la dieta basada en plantas para que los niños aprendan a cuidar el medio ambiente, es recomendable escoger alimentos locales. Es decir, aquellos alimentos que son cultivados de manera orgánica y agroecológica. Sobre todo, los productos en los que no se utilizó ningún tipo de pesticida y en los que se respetaron los ciclos correspondientes de la naturaleza.

Los alimentos orgánicos que se cultivan localmente, resultan una gran opción, siempre y cuando se preserve la fertilidad natural de los suelos. Así como también, la actividad biológica, cuidando la biodiversidad y haciendo lo posible para favorecer los ecosistemas.

5. Disminuir el uso de aparatos electrónicos

Puede que muchos lo desconozcan, pero actualmente, una gran parte de la población deja una gran huella por medio de la tecnología digital. No se trata solamente de infraestructura, la cual se activa una vez se consume, así sea poca información. El uso e incluso el gran impacto, generado por la creciente producción del propio dispositivo, es uno de los parámetros que se deben tomar en cuenta.

Es por esta razón, que toda la familia debe comprometerse por igual y de manera seria a sustituir y utilizar los dispositivos electrónicos con menos frecuencia de lo habitual. Quizá sea un poco difícil al comienzo, ya que cada día las personas se ven más y más sumergidas en el mundo de la tecnología.

No obstante, no tiene sentido sustituir el dispositivo actual, por uno más reciente, si el primero aún funciona perfectamente. Esto es algo que se tiene que enseñar a los más pequeños, ya que los aparatos electrónicos pueden llegar a ser muy contaminantes para el medio ambiente.

6. Enséñale a tu hijo la importancia del uso de la bicicleta

Entre diferentes tipos de transportes que benefician al medio ambiente, la bicicleta se encuentra entre los más importantes. La razón es muy simple, se trata de un medio de transporte que no produce ninguna clase de emisión o gas contaminante.

En otras palabras, la bicicleta no contamina el aire, por lo que la salud nunca será perjudicada, tal como ocurre con los vehículos automotores. Además, montar la bici es una excelente forma de realizar ejercicio, lo que es bastante beneficioso.

Asimismo, la bicicleta es un medio de transporte muy accesible, es decir, no son costosas, son ligeras y no necesitan mucho espacio para guardarlas en casa. Hoy en día, es común ver a padres e hijos montar una bici en un parque y recorrer parte de la ciudad juntos. Esta práctica es muy hermosa y lo mejor es que ayuda a cuidar el medio ambiente y la salud por igual.

7. Visita lugares rodeados de naturaleza

Otra de las mejores formas de criar a un hijo para que sea amigable con el medio ambiente, es llevarlo a conocer los entornos naturales. De esta manera, los pequeños no solo podrán observar la belleza de la naturaleza, también aprenderán poco a poco sobre su importancia para todos los seres vivos.

Por lo general, los entornos naturales están llenos de vida, tanto especies animales como diversas plantas, suelen convivir en un mismo ecosistema. Esto puede ser de gran ayuda para enseñar a los niños a que siempre tienen que valorar a la naturaleza, ya que sin esta no los humanos no podrían sobrevivir.

Fuentes: Clarin, Yo me cuido, Stop cambio climático.