Solemosescuchar que el desayuno es la comida más importante del día, sin embargo, loscientíficos no logran llegar a un consenso, lo que sí se sabe es que saltarse la primera comida del día noadelgaza, todo lo contrario.
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Deacuerdo a los expertos en nutrición, eldesayuno debe aportar en torno al 20% de la energía total del día. Comparandola ciencia con la realidad, un estudio reciente arrojó que el 75% de la población española de entre 9 y 75 años no realiza undesayuno completo y el 91% de losniños de 9 a 12 años no prueba la fruta fresca, según reflejó el informeEstado de situación sobre el desayuno en España, realizado por la Fundación Española de Nutrición (FEN). Datos como este renuevan un debate que nunca termina de zanjar: ¿qué tan importante es el desayuno, y cuánta atención de prestamos en realidad?
¿Es realmente importante eldesayuno?
Enel caso de los niños, según Kids Health:
Duranteel desayuno, le damos al cuerpo la energía que necesita. Los niños que desayunan tienden a ser más sanos y son más propensos aparticipar en actividades físicas, dos maneras excelentes de mantener unpeso saludable.
Saltear el desayuno hace quelos niños estén casados e irritables. Por la mañana, el cuerpode estos niños debe recuperar la energía perdida durante las 8 a 12 horas desueño para poder funcionar bien durante el resto del día. El humor y la energía de estos niños pueden caer rápidamente a mediamañana si no comen por la mañana.
¿Qué sucede con los adultos?
Eldesayuno es la oportunidad de comenzarcada día con una comida saludable y nutritiva. Los adultos que afirmantomar un desayuno saludable con regularidad son más propensos a:
- Consumir más vitaminas y minerales.
- Controlar su peso. Las investigaciones sugieren que consumir la mayoría de las calorías diarias por la mañana puede ayudar al adelgazamiento.
- Controlar su nivel de azúcar en sangre, que es importante para la prevención o el control de la diabetes.
- Consumir menos grasa y colesterol.
- Desempeñarse mejor en el trabajo.
Hay varias versiones al respecto. La de la medicina tradicional es la más difundida: un desayuno completo contiene una porción de cereal, una fruta y un lácteo.
Por otra parte, están quienes desaconsejan por completo el consumo de lácteos (y también quienes deciden no consumirlos por respeto a los animales).
En ese caso, la combinación de fruta y cereales debería complementarse con alguna proteína vegetal.
Saltearse el desayuno no tiene ningún beneficio. Las dietas y entrenamientos que sugieren, por ejemplo, hacer ejercicio cardiovascular en ayunas, están dejando de lado por completo el cuidado de la salud holística del cuerpo.
Así que ya sabes: si tu madre te decía "desayuna como un rey, almuerza como príncipe y cena como mendigo", hazle caso, porque todo indica que tenía razón.
¡A desayunar!