Hay momentos en los que el refrigerador y la despensa de la cocina bien podrían servir para guardar viejos abrigos del invierno. Puede ser que se te haya olvidado ir al mercado, que solo tengas unas cuantas sobras de los días anteriores, o que se te esté haciendo difícil llegar a fin de mes y no puedas darte el lujo de comprar todo lo que te gustaría.
Aún en esos momentos de emergencia o bancarrota, puedes inventar algo para cenar. ¡Y no necesariamente tiene que ser feo o escaso! Con creatividad y unos cuantos billetes puedes hacer algunas comidas que te salvarán de un apuro. Así que si éste es tu caso, toma nota y ponte el delantal.
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1. Guiso
Una de las comidas más famosas en tiempos de crisis es el guiso. ¿Por qué? Porque no necesita muchos ingredientes y es muy rendidor. Si vives solo/a puedes incluso congelarlo por porciones y comerlo otro día de la semana. La ventaja del guiso de vegetales es que es fácil de hacer, porque los ingredientes se cuecen juntos en caldo o salsa de tomate. Además, para hacerlo más "contundente" puedes agregarle fideos, arroz o lentejas, algo que sí puede ser que tengas en la despensa.
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2. Panqueques
Otra de las comidas en tiempos de crisis que quizás no se te ocurrirían tan fácilmente son los panqueques. Sí, no siempre los panqueques tienen que ser dulces. Los puedes usar como una masa base para rellenarlo con vegetales u otras sobras que tengas en el refrigerador, como si fueran tacos. Y si no tienes nada de eso, un poco de queso lo resolverá todo. Además, para prepararlos solo precisas: huevos, harina y leche, en pocas cantidades. Incluso, hay versiones que omiten alguno de los ingredientes y encuentras muy fácil navegando en la web.