En México, una empresa llamada Depresa fabricó un nuevo tipo de refrigerador, al que se le conoce como Ecoplanet. Este invento es totalmente ecológico y no requiere del uso de electricidad. El nuevo artefacto revoluciona al mundo, y representa una gran esperanza para la población sin acceso a servicios básicos como la energía eléctrica.
La conservación de algunos alimentos es completamente imposible en algunos lugares del mundo donde no hay electricidad. Por lo que la empresa mexicana, Depresa, decidió crear un artefacto de conservación de alimentos que no la requiriera. De ahí partieron para la creación del Ecoplanet, el refrigerador ecológico que hoy se considera que revoluciona al mundo.
¿Cómo es éste refrigerador?
El Ecoplanet es un refrigerador hecho completamente de barro, y su forma se asemeja a la de un garrafón de agua redondo. Lo que lo hace ecológico no es únicamente el material con el que está hecho. Sino también su funcionamiento, que lejos de depender del uso de la energía eléctrica, trabaja a partir de los principios de la física clásica.
Para funcionar de manera correcta, y no dañar la comida que resguarda. El refrigerador cuenta con un diseño único totalmente diferente al diseño más tradicional del mismo. Sus diferencias comienzan por el hecho de que es creado a base de barro y en que su forma es parecida a la de un garrafón de agua. Además de esto, lo constituyen dos partes, un compartimiento donde se deposita arena húmeda y otro donde se guardan los alimentos.
El compartimiento “exterior” debe ser rellenado con materiales como la tierra, la marmolina, arena, grava y graznol. Los cuales deben ser mezclados con agua hasta que se humedezcan. Mientras que el compartimiento “interior”, es donde se guarda la comida, la arena húmeda es la encargada de mantener a bajas temperaturas el contenido. De igual forma, se debe colocar al refrigerador en la sombra, donde los rayos ultravioletas emitidos por el sol no hagan contacto directo con el recipiente.
Al estar en contacto con las altas temperaturas del exterior, el agua contenida en la mezcla de tierra o arena empieza a evaporarse. Esto ocasiona que el calor de la comida resguardada sea eliminado. Manteniendo entonces a los alimentos a bajas temperaturas, en específico de unos 8 grados.
La arena debe humedecerse con al menos 3 litros de agua al día, para que el refrigerador ecológico funcione de manera correcta. Este artefacto se encuentra en el mercado mexicano desde 2015 y ha dado resultados favorables.
Población sin acceso a electricidad
En México, alrededor de 5 millones de familias no tienen un refrigerador. Esto puede darse debido a que no tienen acceso a la electricidad, por vivir en comunidades apartadas. O porque no tienen la capacidad monetaria de comprar uno.
Sea cual sea el caso, el refrigerador de barro de Depresa representa una buena opción. Ya que no sólo es ecológico y no necesita corriente eléctrica. Sino porque también es más barato que cualquier otro refrigerador convencional en el mercado. Con este nuevo invento no sólo se ayuda a la población vulnerable, sino que también se protege al medio ambiente.