Cómo convertir una vieja camisa en un vestido de niña

Al momento de pensar en la ropa, muchas veces lo primero que se cruza en nuestros pensamientos es el deseo de tener una nueva prenda. Sin embargo, eso no necesariamente tiene que estar unido al gasto de dinero, ya que es posible reutilizar viejas prendas para crear nuevas que, además de ser originales, tendrán el valor agregado de un trabajo manual, y la reducción del consumo, con la ventaja que esto implica a nivel medioambiental.

En esta nota aprenderás cómo convertir una vieja camisa en un vestido de niña tú mismo y en simples pasos. También puedes conocer otras ideas para hacer con una vieja remera.

¡Súmate a la moda sustentable!

Materiales

- Una camisa de hombre en desuso (procura que, de todas formas, se encuentre en buen estado)

- Máquina de coser (aunque también, si prefieres, puedes hacerlo a mano)

- Vestido para tomar el molde (preferiblemente sin elástico)

- Hilo de coser en carretel

- Papel manteca o de calcar

- Lápiz

- Cinta métrica

Procedimiento

1. En una superficie plana, obten las mediciones del vestido que vas a realizar, tomándolas con un lápiz sobre el papel manteca o de calcar. Luego, corta el esquema por los bordes.

2. Una vez que tengas tu molde preparado, coloca la camisa de hombre en la superficie y córtale tanto los brazos como el cuello, tal como puedes ver en la fotografía.

3. Utiliza el molde que preparaste para cortar la camisa, dejando un margen de costura de 3/4 de pulgada. 

4. Da vuelta y haz un pequeño dobladillo para que no se deshilache la tela con el uso. 

En este punto, si puedes, prueba el vestido para comprobar que el tamaño sea correcto antes de hacer las costuras. 

5.  Para las mangas, mide con una cinta métrica la parte superior de la sisa de la longitud que quieres que tenga la manga.

Luego, dibuja una línea en el papel que mida el doble de la medida que tomaste y recorta un retazo de la camisa que te haya quedado sin usar, de ese largo.

Una vez que tengas esto listo, desde el centro de la medida, une ambos lados para formar una pequeña curva. Pliega la costura a lo largo del borde para generar el efecto de volados. Una vez que tengas esto listo, únelo al vestido.

¡Así obtendrás, de una vieja prenda, una nueva para obsequiar a las más pequeñas de la familia!