En los últimos días se generó un revuelo entre los vecinos de la localidad de Playa Unión que repercutió en toda la provincia. Y no es para menos, la postal de la costa fue fuerte. Un caño oxidado, colocado al inicio de la escollera norte, estaba volcando sedimentos directamente en la costa.
Según el proyecto inicial, se dragarían más de 400.000 m³ de sedimentos, lo que equivale a 10 manzanas de 4 metros de alto. ¿Cuál es el objetivo? mejorar la navegabilidad de los barcos pesqueros del puerto que utilizan la pesca de arrastre como método extractivo.
De un día para otro un caño apareció en la costa de Playa Unión escupiendo un líquido negro. Esa fue la imagen que los vecinos de la localidad vieron y fue la punta del iceberg que dio inicio a lo que se vendría después.
La reacción social no se hizo esperar y las redes se inundaron de reclamos y pedidos de explicación a las autoridades y a la empresa. Un día después de que se viralizaron las imágenes, el intendente de Rawson, Damián Biss, presentó una medida cautelar en la Justicia para que detengan las obras.
En respuesta a todo esto, el ministro de Infraestructura de Chubut, Gustavo Aguilera dijo en conferencia de prensa que “el sedimento que se está volcando es el mismo que tiene el mar” y que están todas las condiciones dadas para seguir con la obra de dragado.
Pero los vecinos, profesionales, instituciones y organizaciones no se quedaron conformes con la versión oficial. Y no es para menos, las imágenes aéreas muestran la zona de la playa con enormes manchones negros que se expanden por el cordón costero. Algo no está bien.
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Finalmente, luego de tres días donde se volcó una enorme cantidad de metros cúbicos de sedimentos al mar, la Justicia de Chubut ordenó suspender la obra del dragado, tras darle lugar a la medida cautelar presentada por el intendente de Rawson, luego de la presión social recibida.
Según resolvió el Poder Judicial de la provincia, la empresa debe frenar el dragado hasta tanto se acredite en la causa que los líquidos, refulados y/o sedimentos no afectan el medio ambiente. Además, le ordenó a la firma instalar, en el término de 24 horas, medidas de seguridad en el sector en el que se iniciaron los trabajos.
Ver para comprometerse
Ese pedazo de fierro escupiendo un espeso liquido negro fue lo que activó las alarmas de la comunidad en general. Si bien siempre hubo un grupo de vecinos y profesionales que alertaron sobre el tema y que se comprometieron con la causa, la medida cautelar llegó recién cuando la presión social se hizo más fuerte. La unión motivó el reclamo y el reclamo exigió acción.
En este sentido, hubo más de 95 presentaciones en la Justicia de vecinos, profesionales e instituciones que reclamaron y objetaron sobre esta obra.
No obstante, la obra de dragado en el Puerto de Rawson se viene planeando desde hace años, pero fue recién, cuando colocaron el tubo oxidado, como un cañón apuntando contra la salud ambiental del mar, cuando la comunidad formó un sólido frente.
Cómo se llega a la obra de dragado
Para entender un poco más la situación hay que remontarse al 2021. En noviembre de ese mismo año la empresa SUDELCO ganó la licitación para hacerse cargo de la obra de dragado del Puerto Rawson. Dichos trabajos demandaron una inversión de 559 millones de pesos y el plazo de ejecución era de 270 días.
Estos trabajos eran intensamente reclamados desde el sector pesquero para “garantizar la navegabilidad de los barcos” que utilizan la pesca de arrastre como método extractivo.
Parte del contrato de obra que firmó la empresa estipulaba que se debía realizar un informe de impacto ambiental, el cual, luego de ser aprobado por el Ministerio de Ambiente de Chubut, daría el visto bueno para iniciar los trabajos. Este requisito está a cargo de la propia SUDELCO.
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Siguiendo los pasos, esta empresa contrató a una consultora ambiental llamada RYTEC. En septiembre de 2022 dicha consultora expide un informe que, a grandes rasgos, le da viabilidad al proyecto del dragado, no sin antes reconocer que:
“Los suelos y sedimentos se verán afectados en gran medida por su reubicación sobre la costa de Playa Unión; la calidad del agua se verá directamente afectada por un previsto incremento de la turbidez y puesta en suspensión del material de fondo; la atmósfera del área de trabajo se verá principalmente afectada por un aumento en las emisiones de ruidos, gases de combustión y polvos en suspensión y existirá un desplazamiento temporal de la macrofauna que suele rondar las instalaciones portuarias (aves, lobos marinos, peces y otros)”.
De esta presentación ambiental, surge un dictamen realizado por los técnicos del Ministerio de Ambiente de Chubut quienes evaluaron la presentación y se expidieron. Este propio dictamen es el que luego, las autoridades utilizarían para aprobar o no el proyecto.
Y acá está la cuestión de fondo.
El dictamen sostiene textualmente lo siguiente: “En vista de lo expuesto, este equipo técnico evaluador considera necesario REFORMULAR el Documento Ambiental, solicitando la presentación de un nuevo ESTUDIO DE IMPACTO AMBIENTAL, para ser sometido a proceso de Evaluación de Impacto Ambiental según lo estipulado por la legislación vigente, que incorpore alternativas superadoras para la disposición final de los sedimentos, contemplando su potencial reúso e incorporando un diseño de monitoreo para agua y sedimentos representativo del sistema”.