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El ser humano consume en la actualidad 1,7 veces los recursos naturales que el planeta puede proveer cada año. En pocas palabras, estamos viviendo en este mundo como si tuviéramos otro lugar a donde ir. Esto se debe a que muchas veces los recursos se utilizan como si fueran infinitos.
Es importante tomar algunas acciones y cambiar algunos hábitos para poder revertir esta situación. El cuidado del agua y el ahorro de energía en el hogar son claves para mantener un estilo de vida más sustentable. A su vez, existen ciertas acciones que parecen mínimas pero que, al hacerlas, nos convertirán en consumidores responsables.
¿Qué significa esto? Se denomina consumo responsable al conjunto de prácticas y estrategias que están pensadas para permitir al ser humano llevar a cabo sus actividades normales y cotidianas con una perspectiva diferente sobre el uso que se hace de los recursos naturales y de los desechos que se generan.
Aplica estos consejos y recuerda que cada peso que gastas es un voto por el mundo en el que elijes vivir.
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28 acciones que te convertirán en un consumidor responsable
1. Separa tus residuos. De esta manera estarás contribuyendo al reciclaje y estarás ayudando a reducir la extracción de recursos naturales.
2. Si tienes lugar, composta los residuos orgánicos. Usa los restos de frutas y verduras para fertilizar y enriquecer la tierra de tu balcón o jardín.
3. Los envases de vidrio retornables son preferibles a los de plástico, ya que después de ser lavados, se vuelven a utilizar muchas veces.
4. Antes de tirar algo que no uses y esté en buen estado, regálalo o véndelo en un sitio online de subastas.
5. Solicita tus notificaciones, resúmenes y estados bancarios por Internet, así reducirás el correo postal innecesario y evitarás la tala de cientos de árboles para la fabricación del papel.
6. Trata de no usar servilletas y pañuelos desechables. Usa los de tela y lávalos sólo cuando sea necesario. También puedes usar filtros de café reutilizables.
7. No arrojes basura en la vía pública. Tírala en su cesto correspondiente. Si no tienes uno cerca, guárdala en el bolsillo hasta que encuentres uno. Lleva siempre una bolsa reutilizable contigo.
8. Evita usar vajilla, cubiertos y cotillón desechable. En caso que sea inevitable, usa etiquetas para marcar el nombre de los invitados en cada pieza de vajilla para que a lo largo de la reunión utilicen los mismos elementos y no nuevos. Luego, puedes lavar los desechables y guardarlos para el próximo festejo.
9. Utiliza fósforos en lugar de encendedores, ya que se descomponen más fácilmente. Otra alternativa es usar encendedores que sean recargables.
10. Prioriza el contenido antes que el envoltorio. Elige los productos que usen sólo el embalaje necesario para garantizar la calidad y seguridad de lo que compras. Prefiere los productos con envoltorios de papel o cartón con certificación FSC (Forest Stewardship Council). Esto significa que el uso del árbol como materia prima no genera desertificación ni reducción de bosques nativos.
11. Elige electrodomésticos y juguetes de calidad. Antes de comprar, recuerda el refrán: "Lo barato sale caro". Ten en cuenta la vida útil de los productos para generar la menor cantidad de chatarra posible.
12. Para envolver los regalos, usa papel reciclado, revistas o papel de diario.
13. Arregla las cosas que se rompen. Si se pueden reparar, no las tires.
14. No tires comida. Planifica un menú semanal y, en base a eso, realiza una compra mensual. Adquiere solo lo que necesites. Quizás te interese saber que la mitad de la comida producida en el mundo se desecha, lo cual supone un enorme desperdicio de los recursos del planeta.
15. Trata de servir porciones adecuadas en el plato. Cada año se tiran 2.000 millones de toneladas de alimentos.
16. Cuando vayas al supermercado, lleva tus propias bolsas reutilizables. ¡Dile no a las bolsas de plástico!
17. En tu casa, usa solo bolsas de residuos biodegradables.
18. Consume fruta y verdura de estación. Además de ser más baratas, suelen ser cultivadas localmente, a diferencia de las que son importadas y tienen una mayor huella de carbono.
19. Compra productos a granel. Cuando no sea posible, intenta optar por los envases familiares. Elige aquellos productos con repuesto económico para rellenar los envases que tienes en casa.
20. Imprime solo si es absolutamente necesario. So lo haces, procura que sea en ambas caras. Así ahorrarás un 50% de papel.
21. Utiliza papel reciclado o con certificación FSC.
22. Para ahorrar tinta, usa fuentes tipográficas ecológicas. Esto te permitirá ahorrar hasta un 50% de tinta.
23. Junta las pilas o baterías usadas en una botella y llévalas a un centro de reciclado. Asegúrate de que no terminen en un relleno sanitario.
24. Una batería de mercurio contamina 600.000 litros de agua. Nunca las deseches junto con tu basura doméstica.
25. No compres dispositivos electrónicos que utilizan baterías tipo botón. Son muy contaminantes y difíciles de reciclar.
26. Usa baterías recargables. Cada una reemplaza cerca de 500 de las convencionales.
27. Si vas a colocar un hogar o salamandra en tu casa, elige una que sea cerrada y con cámara de doble combustión. Usa únicamente leña proveniente de bosques de cultivo, ecoleña o pellets (residuos prensados de remolacha, caña de azúcar, maíz, jatropha, camelina y residuos de actividades agrícolas, forestales, ganaderas, urbanas).
28. Recicla la ropa muy vieja o rota. Córtala en rectángulos y úsala como trapo para la limpieza de la casa.
