Una gran cantidad de personas se guía exclusivamente de la fecha en el envase para saber cuando la comida está en mal estado, incluso con los huevos. Pero la "venta por fechas" es a menudo bastante arbitraria, y no se correlacionan con las fechas de vencimiento.

Los huevos se pueden comer incluso mucho después de la fecha de vencimiento que dice el envase. Si deseas probar cuán frescos están y te resulta algo difícil o no sabes cómo hacerlo, aquí hay algunos métodos para probarlos.

1. Prueba del vaso con agua

Sólo tienes que rellenar un recipiente con agua fría y colocar los huevos en el tazón.

  • Si se hunden hasta el fondo y se colocan sobre sus lados, son muy frescos.
  • Si tienen un par de semanas de edad, y se quedan asentados en uno de sus extremos en la parte inferior de la taza siguen estando buenos para comerlos.
  • Si flotan a la superficie, ya no son lo suficientemente frescos para comer.

La razón de este método funciona muy bien ya que las cáscaras de huevo son porosas, lo que significa que permiten la entrada de aire. Los huevos frescos tienen menos aire en ellos, por lo que se hunden hasta el fondo. Pero los huevos más viejos han tenido más tiempo para que el aire penetre en las conchas, por lo que son más boyante y flotarán.

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2. Ver el tiempo de empaque

Para tener una idea de la “edad” de un huevo, debemos mirar el "el tiempo de empaque" por las fechas en la caja de cartón, que son en forma de fecha juliana para las fechas de "venta". Las fechas julianas van de 1 a 365 días, y ya que la mayoría de las compañías empacan sus huevos poco después de recibirlos, es un buen indicador.

3. Escuchar cómo suena por dentro

Algunas personas también afirman que puede sostener un huevo en su oído y agitar para determinar su frescura. Si puede oír un sonido de chapoteo en el interior del huevo, probablemente este malo, pero si no se oye nada, está bien para comer.

4. Método de examen de trasluz

Está el método de examen de trasluz, que se utiliza principalmente para probar la calidad del huevo antes de poner los huevos en el mercado, pero que también ayuda a determinar la frescura, aunque es más difícil de ver en las etapas posteriores. Algunos sólo colocan una linterna justo al lado de la cáscara del huevo para iluminar el interior, pero históricamente, se utilizó un pedazo de cartón con un pequeño agujero en él, con una fuente de luz detrás de él y el huevo delante.

Este método te permitirá ver el espacio aéreo y el moho, pero en realidad es una técnica difícil de lograr.

Por encima se puede ver un huevo fresco (poco espacio aéreo, yema ligeramente visible), un poco pasados (espacio de aire más grande, yema ligeramente más oscura), una huevo casi malo (yema muy oscura e irregular), y un huevo en mal estado (la yema muy oscura y deformada) utilizando la técnica de trasluz.

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5. La placa y prueba de aspiración

Si no necesitas la cáscara intacta, también puedes romper el huevo en un plato u otra superficie plana para probar cuán fresco esta. Si es fresco, la yema debe ser de color amarillo brillante o naranja y el blanco no debe extenderse mucho. Si no estás seguro, respira cerca de él: Los huevos frescos no deben tener mucho olor en absoluto.

Si el huevo tiene más tiempo, la yema será más plana y el blanco será mucho más líquido. Un huevo que se extiende demasiado no está necesariamente malo, sin embargo, sólo los mayores (y de nuevo, bueno para los huevos duros). Es probable que ni siquiera tengas que hacer la prueba de la aspiración cuando los huevos estén en mal estado ya que los que están podridos tienen un olor muy fuerte, y te darás cuenta de inmediato.

Qué hacer con los huevos que expiran pronto

¿Tienes un montón de huevos y piensas que se pondrán malos antes de poder usarlos? Hazlos hervir y ponlos en un frasco con una salmuera de remolacha para hacer huevos en escabeche picantes y deliciosos, y así podrás conservarlos por más tiempo.

También hay un montón de cosas que puedes hacer con esas cáscaras desechadas, como hacer que tu tetera este súper limpia, fertilizar el suelo, etc. Y no te olvides de los cartones de huevos sobrantes, que vienen bien por ejemplo para ponerle comida a los pájaros, como fuente de combustible para el fuego, posa velas, etc.

Fuente:
Para los Curiosos
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